22- Caulifla y Parsley

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Volviendo al momento cumbre entre los dos enamorados. Se detuvieron al último segundo, se miraron de manera temblorosa, la atmósfera de ambos se volvió un momento incómodo. Los dos pensaban lo mismo del otro respecto a no haber continuado con la movida.

¿Qué pasa, tonto? esto...

¿porqué paras?

¡Hazlo, no me dejes como tonta!

Seguramente lo eché a perder...

¡Acércate, maldición!

¡Haz algo!

Y ninguno de los dos cedió. Además de que las felicitaciones de los demás por la pelea les hicieron interrumpir todavía más el momento a estos dos. Lamentablemente no podían hacer nada más, todos seguían mirando pero aparentemente sin haberse dado cuenta de lo que había pasado ahí abajo.

—¡¡Papá, eres el mejor!! —Le gritó Goten junto con Gohan—, ¡¡no me importa que hayas perdido, para mí eres el ganador!!

—¡¡Los saiyajin somos los mejores de éste universo!!

Cabba alzaba un puño en victoria de los saiyajin. A su lado, Kale sollozaba intentando sonreír de alegría más que de tristeza.

—¡Bien hecho! ¡Peleaste muy bien, Parsley!

—Mi hermana es a-asombrosa. ¡La admiro mucho!

—¡Chicos, me tienen sorprendida! ¡Los adoro! —Decía Bulma tan contenta.

Junto a ellos, Vegeta cerró los ojos pensando con seriedad en el resultado de la pelea, no estaba conforme.
Gohan dió algunos aplausos y mantuvo su opinión sólo con Piccolo. Además de Vegeta dando de qué hablar por estar sumido en sus pensamientos respecto al combate.

Esos insectos... solo tuvieron suerte con Kakarotto. Porque aún no se han enfrentado a mí”.

—¡Je, je!, lo hicieron bien, me tienen sorprendido.
Señor Piccolo, ¿usted cree que Parsley habría sido buena elección para llevarlo al torneo de poder? Digo... En caso de haberlo tenido en ese entonces...

Piccolo se limitó a sonreír discretamente con la pequeña Pan riendo entre sus brazos, afirmando que Parsley sí habría sido buena opción. Un gran integrante.

—Yo digo que sí... Un gran elemento.

Caulifla y Parsley se separaron dejando sus nervios de lado.
Goku sentado en el piso se levantó por cuenta propia. Los jóvenes saiyajin al frente suspiraron para disimular la incomodidad del momento, volviendo a tratar de mirarse para comprobar si ya estaban más tranquilos. Parsley estiró su mano derecha ofreciéndole confianza a Caulifla que la tomara. Ella, dudosa, lentamente estiraba su mano izquierda para sujetarlo, pero llegaron volando Goten y Trunks interrumpiendo de nuevo en el momento más inoportuno, aunque no dejaban de mirarse. Muy emocionados los niños saiyajin flotaban frente a ellos expresandoles lo impacientes que se sentían por querer pelear en su contra.

—¡¡Oigan!!
—¡¡Oigan!!

—¡Parsley, tienen que pelear con nosotros, es en serio!

Parsley. Saiyajin Después Del HipersueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora