sadboy ;; happyboy

After One Week and Some Questions.

Min Yoon Giー.

Eran las seis de la tarde. Después de una semana de que Hoseok y yo nos encontráramos, estábamos encantados. Él me hizo feliz y yo a él, junto con Namjoon de por medio la pasamos genial.

Él día que Hoseok me compró flores.

ー¡Yoongi-ah! ¡Toma!ー gritó detrás mío el ahora pelirojo rayo de sol.

No sólo su cabello estaba rojizo sino también sus mejillas y parte de sus hermosos ojos, todo contrastaba en un perfecto chico delgado y alto.

ー....¿margaritas?

ーSi no te gustan, tíralas.

ー... tirar...¡Ah, nononono!ー negué con la cabeza y las manos, tratando de sonreírle.

Estábamos frente a la floristería, en la acera donde todos nos veían. Una que otra chica tomando vídeo, pero también uno que otro grupo de amigos riendo.
Tomé las margaritas rápidamente y las pegué a mi pecho.

ーSon igual de lindas que tú Yoongi, son blancas como tu cabello, y un pequeño punto de color amarillo como tu bonita piel.ー era mi imaginación o se escuchaban multitudes detrás nuestro haciendo sonidos de emoción, ese clásico "aww" de siempre.

ー..ehe, anda ya Hobi, debemos irnos.ー reí y rápido corrí hasta sus brazos, cómodo como siempre.

No me apenaba su regalo, sino que medio mundo nos estuviera viendo, disfrutando de un sentimiento que sólo yo quería sentir. Si, llámenme egoísta. Al parecer ir a abrazar al lloroso Hoseok no fue una idea tan buena después de todo ya que, los sonidos de emoción se incrementaron más, se nos hacía un poco extraño de cierto modo que algunas personas no le cubrieran los ojos a sus hijos porque vamos, éramos una pareja gay teniendo un momento gay, aún hay gente que no lo acepta del todo, pero nos tocó gente buena ese día.

Cuando Hoseok me dijo que me quería.

Sus brazos intentaban rodear mi delgado torso. Era por la mañana, no había ningún sonido, su respiración sólo era aire, ni frío ni caliente, era ligero, como si durmiera en estado de paz, al parecer tenía un extraño hábito de abrazar lo que estuviera cerca de él mientras dormía, y acariciarle, casi podía apostar que estaba insitándome de nuevo a, ya saben, eso.

ーyngi... yon, yooni, yoongi.. abrázame.ー oh cielos que era hermoso escuchar la voz de ese ángel, pensó el casi despierto Min Yoon Gi.

No quise contestar, era de mañana, quería conservar a toda costa el ambiente de serenidad y el casi silencioso sonar del viento pasando por las ventanas, los aletéos de las palomas más valientes paradas sobre la penúltima ventana del edificio donde vivía Hoseok.

ーYoongi.ーpor fin pudo decir el ya despierto sol.ー ¿tú pusiste mi brazo sobre tí?ー su rostro estaba hinchado, era gracioso, pero a pesar de ello, me dí la vuelta hacia donde él y tomé su rostro, sólo para apretarlo. Le sonreí.

Bien y perfecto pude ver una sonrisa enorme en él, al parecer le hacía feliz que yo lo estuviera. Estaba despeinado, su cuello tenía marcas, sus brazos tenían.. mis dedos marcados, inclusive, su espalda estaba llena de rasguños que yo le hice. Me sentí mal, no quería ser esa clase de persona, pero la voz de Hoseok me sacó de mis pensamientos.

ー¿Qué hora es, eh? Namjoon debió despertarnos.

ー¿Si?ー lo había escuchado en la cocina justo después de despertarme, pero no le dije, no había razón, sólo no lo hice, supongo que no lo hice porque no quería hablar, estaba tan sereno que deseaba mantener los ojos cerrados por un largo tiempo, no dormir, sólo cerrar los ojos y escuchar el sonido del silencio.ーQuizá esté dormido en su enorme cama.