Camila//Camren

Prólogo

Día 14 del mes de Marzo en el año 2027

En una habitación blanca, con computadoras en las paredes y cables esparcidos por todo el piso, se encontraba una mujer vestida elegantemente para la ocasión y frente a ella una chica, de dieciséis años, vestida con un conjunto que va de acuerdo al sitio, cubriendo partes de su cuerpo delgado y moreno.

-¿Estás lista?-preguntó la mujer de cabello castaño al prototipo de semblante serio.

-Sí, Sofía.

La mujer sonrío orgullosa al escuchar su creación.
Sus ojos verdes se movían por todo su cuerpo, tratando de hallar algún error en ella pero no hubo ninguno.
Su mirada se detuvo un momento en los ojos chocolate, no transmitían nada y eran tan intimidantes.

Sofía dio unos pasos atrás admirando a la bella chica. Había trabajado por años y se podía apreciar eso. Su piel, sus labios, sus ojos, su cabello, todo de ella se veía tan real.

El sonido de la puerta automática abriéndose interrumpió sus pensamientos y miró al hombre apuesto de cabello negro y ojos azules, se veía muy elegante gracias al traje que llevaba puesto.

-Es hora de ir-le dijo regalando su mejor sonrisa.

-Lo sé, Marck-suspiró observando una vez más a su creación quién miraba curiosa al hombre que acababa de entrar.

-Aprobarán esto, de eso estoy seguro-miró a la chica-es perfecta, una hermosa creación, Sofía.

La mujer rueda los ojos al ver como la mirada azul de su amigo recorría el cuerpo de la chica, mientras que ésta solo la miraba expectante.

-Cierra la boca y deja de coquetear con una máquina.

-Una máquina que puede tener sentimientos.

-Eso aún no está comprobado-dijo la mujer conectando su mirada con la de él.

-Pero lo puede tener en un año.

-No est-

-Shhh-la interrumpió-trabajaste esto por años y tú eres magnífica, lo lograrás-le guiñó el ojo-además, aposté por ti, no me defraudes, Sofi.

-Te dije que no me llames así.

-Esta bien-dijo entre risas-anda, te están esperando.

Los dos se regalaron una sonrisa y Sofía le dio una señal a la chica para que los siguiera.

* * *

-Buenas tardes-saludó al grupo importante que estaban sentados en las sillas, todos expectantes y curiosos al ver a la mujer junto a una chica muy bella, suponiendo que ese era el proyecto de la científica que estaba trabajando por años-hoy les presentaré mi proyecto, el más avanzado que pude lograr hacer-la mujer hablaba mientras caminaba alrededor de la chica-estoy hablando del prototipo K4G70-detuvo su caminata mirando a su creación-como pueden observar, además de lo realista que es, es un modelo tipo adolescente y es capaz de envejecer hasta que su batería acabe por completo.

-¿Cuánto tiempo dura la batería?-preguntó un señor calvo desde las sillas, interrumpiendo el discurso de Sofía.

-Solo noventa y cuatro años, señor Lewis-respondió la pregunta con mucho respeto.

El señor asintió sorprendido al notar el tiempo que podía durar. Sofía suspiró y estaba apunto de proseguir pero una mano entre la gente hizo que se callara.

-¿El prototipo envejecerá como todo humano?-preguntó una mujer de cabello negro algo insegura.

-Claro que sí-afirmó-como dije, traté de hacerla lo más humana posible-se acercó más a la chica-su piel es suave-dijo acariciando el brazo de su creación, aprobando la suavidad de éste-además-tomó un bisturí de una bandeja y fue hacía el brazo moreno que anteriormente fue acariciado y cortó gran parte de su piel.
El grupo de gente se sorprendió al ver lo que causaba ese corté en la chica.

-Duele-gimió la morena a su dueña, su rostro estaba expresando el dolor que sufría en ese momento, la mujer se detuvo al escucharla, dejando el bisturí en la bandeja para luego ir hacía la chica y agarrar el brazo herido y mostrarle a todos.

-Ella puede sufrir cualquier herida y sangrar como los demás-miró a la herida donde salía un líquido morado-a excepción de que esta es de un color morado, y claro, si este líquido se acaba de su cuerpo, puede morir-ahora su mirada viajó al rostro de la chica donde pudo observar como sus cejas se fruncian en señal de dolor-mientras que el prototipo puede sentir el dolor.

-¿Cómo puede ser eso posible?-preguntó un joven algo sorprendido.

La mujer, antes de responder la pregunta, susurró un audible «tócate la herida» en el oído de la chica y ésta obedeció, ocasionando que la herida se cerrara y su piel vuelva a su normalidad, el rostro de la chica se tranquilizó y volvió a su semblante serio.

-Pues, todo está aquí-señaló al cerebro de la chica-inventé un dispositivo donde es posible que ella pueda tener dolor, alegría, tristeza, placer, en pocas palabras, sentimientos.

Todos en la sala quedaron atónitos. ¿Cómo una mujer de treinta y cinco años de edad pudo lograr aquello?

-Gracias a este dispositivo-señaló hacía la pantalla donde se mostraba una bola color blanca-puede formalizar diálogos según lo que ve y siente, si ustedes desean, pueden comprobar haciéndole una pregunta.

Todos alzaron la mano y Sofía rió para sus adentros, su mirada se fijó en el chico que había preguntado anteriormente, parecía que él era el más joven de todos y el más indicado. La mujer asintió a su dirección y él sonrío contento, sin duda él era el indicado.

-K4G70-mencionó él, un poco nervioso al sentir la mirada intimidante de la chica.

-Digame, Parker-pronunció la morena sin quitar su mirada de él, su primera interacción con un humano que no sea su dueña le mostraba interés.

-Ehm, desde que usted, desde que usted-carraspeo, los presentes en la sala negaron su actitud-desde que usted está en el mundo, ¿cuál es la cosa que más le gustó o le hace sentir...intrigada?

-¿Sentirme intrigada?-preguntó la chica viendo al joven quien asintió ante su pregunta-todo, las cosas y, ustedes, los humanos, todo esto es nuevo para mí, aunque tengo información de todas las cosas en el mundo eso no tacha lo intrigada que estoy por verlo todo.

Todos miraron maravillados, ella era capaz de hablar por si sola y no estar programada por otros, era magnífico.

-Muchas gracias-dijo el chico sonriendo.

La morena sonrío y asintió para luego seguir con su semblante serio.

-Bueno-habló nuevamente la mujer-me presenté aquí para que ustedes vean el futuro, ella puede fácilmente camuflarse entre los humanos y ayudarlos-se encogió de hombros-pero el tema de los sentimientos-todos pusieron atención a la mujer-solo presentó dolor e intriga, lo que tengo planeado hacer es llevarla fuera de este lu-

-No se preocupe, señora Sofía-interrumpió un hombre de voz gruesa, cabello color castaño y ojos verdes, se podía apreciar que su traje era el más costoso de todos-su prototipo está aceptado-y sí, el hombre más importante de todo el mundo había aceptado su proyecto.

La mujer asintió, sin enojarse de que interrumpió su habla ya que sabía que si se enojaba con él, perdería.

-Felicidades, usted está trabajando en Corp. Clark's-dijo una mujer al lado del hombre-¿cuál será el nombre de su nueva creación?

Sofía miró a la chica de semblante serio.

-Camila.

"Mujer que se sacrifica por los demás"