Camila//Camren

7. "Fallos técnicos"

Ya había oscurecido, la luna acompañada de estrellas decoraban el cielo, y el auto de Sofía se estacionaba al frente de su gran casa. Camila salió junto a su dueña sin decir ninguna palabra, tan solo miraba como la luna brillaba, no la había visto en persona y estaba encantada por tal belleza.

-Camila-llamó la mayor en la puerta ya abierta.

La mencionada rápidamente la miró y caminó hasta estar dentro. Cada vez que avanzaba observó como ya no había rastros de cajas en la sala, al parecer habían ordenado todo en la mañana, cuando estaba estudiando.

-¿No me dirás cómo fue tu día antes de que sucediera todo ese problema?

El prototipo miró la espalda de la científica, en ningún momento se detuvo, al contrario, seguía caminando, yendo al final de la casa. Al parecer David y April habían salido ya que no los escuchaba, ninguna pisada, risas o voces.

-En lo que es referente al estudio me fue muy bien, los maestros me felicitaron-mencionó viendo como la mujer se detuvo y ponía una clave en la puerta de metal que se encontraba frente a ellas.

-¿Hiciste amistades?-preguntó mientras la puerta se abría por si sola dando paso a unas escaleras que dirigían al sótano, Sofía bajó y el prototipo la siguió.

-Mmh-Camila se quedó en silencio, tratando de colocar las palabras correctas-creo que una chica de cabello morado es mi amiga-dijo dudosa recordándola-su cabello es...-hizo una pausa, un cosquilleo en su cabeza la hizo parpadear, la científica sin darse cuenta de su conducta prendió la luz, iluminando el gran salón lleno de máquinas y en el centro se encontraba la famosa cápsula-es...de otro color, yo quiero tenerlo así-otro cosquilleo hizo que sus labios temblaran y luego sus comisuras se elevaran unas cinco veces, Sofía seguía sin prestarle atención y prendió todos los artefactos-y también, co-conocí a Josh, tengo su número-un último cosquilleo y el párpado derecho de la menor se cerró, dejándola sin visión en un ojo, Camila no emitió ningún sonido e hizo ninguna mueca.

La mujer se colocó su bata que se encontraba en una silla cerca a ella y es ahí cuando volteó para prestarle más atención a su creación, pero al verla quedó horrorizada. Rápidamente corrió hacía ella y la tomó del mentón para observar mejor su párpado cerrado.

-¿Qué pasa? ¿Puedes moverte?-su voz sonando preocupada, temía que tantos años de trabajo no sirvieran para nada.

-No, no, no-repetía la joven sin mover su vista izquierda-no mover, no mover, líquido, líquido en ojo-logró decir mientras comenzó a parpadear el ojo izquierdo.

Sofía entendió todo, de alguna manera el líquido de la pintura había entrado en su cabeza, en el núcleo, y si no hacía algo lo antes posible el prototipo podría no despertar por unas semanas, o peor, su gran invento, su bola de sentimientos y pensamientos podría arruinarse y aquello era el único. Así que rápidamente llevó a la chica a la cápsula donde podría apagarla y poder abrirla para limpiar todo rastro de líquido.

. . .

-Estás un asco-habló Zoey mientras desinfectaba la herida en el labio de su hermano. Se encontraban en el baño de su hogar, solos ya que sus padres habían ido a una cena en el centro de la ciudad. El joven rubio se encontraba sentado en el piso y su hermana al frente suyo intentando curarlo. Zoey tenía razón, estaba hecho un asco, tenía un hematoma en el ojo derecho, su labio inferior estaba roto, sus pantalones estaban sucios y su torso expuesto estaba con más y más heridas.

-Espero que Camila no piense lo mismo-dijo divertido cuando su hermana alejó sus manos de sus labios para colocar una crema en su mano derecha para luego expandirlo en cada golpe.