"Diario de pruebas. Propiedad de Clarke."

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Notas:

He conseguido colarme en el apretado horario de los cónsules Allen y Young, porque ellos habían contactado conmigo ya que la noticia de que un nuevo "Dunai" había entrado así como así en la asociación de Reino Unido, ha corrido como la pólvora hasta llegar a sus oídos.
La reacción por parte del cónsul Keanu Young ha sido bastante sería y crítica,  haciendo incapié en que necesitaba estudiarlo y hablar con él, para estar seguro al cien por cien de que no es una amenaza.
Pero la reacción del segundo cónsul, Maverick Allen ha sido deliberadamente optimista, ya que él parece tener unas ganas increíbles de encontrarse con Leonard y que éste le explique todo.
Y Leonard...
Bueno Leo se siente mal por no saber hace nada.
Puede ser que su depresión tenga motivos...
Pero no debo compadecerme de él.
Leonard Campbell es un sujeto, con el que seguimos trabajando, nada más.
Será un compañero más cuando comprobemos que es parte de nuestra especie.
Aunque...
Al mirarlo me siento mierda, me siento débil.
Como si todo a mi alrededor de derrumbara.
Nunca en mi vida me he sentido tan inútil.
Cuando me mira es como si...
Arg, como si sus ojos candentes grabaran una marca al rojo vivo en mi pecho, haciendo que mi corazón alcance una velocidad tan rápida que me empieza a asustar.
Y yo nunca me he asustado de nada.
Joder, ¿en qué me estoy convirtiendo?
¿Qué narices me pasa?
Este sentimiento de... fragilidad en mi cuerpo no ha hecho más que aumentar desde que lo ví.
¿Por qué?
No sé.
Y hoy la he cagado, le he dicho que no permitiría que le ocurriera nada.
¿En qué narices estás pensando Axel?
No he podido resistirme al ver cómo se le inundaban los ojos...
Ha sido como si me apuñalaran en el pecho.
Sus ojos, mierda, esos ojos inocentes, esa pureza en su voz, su personalidad tímida y discreta...
Consiguen alterarme.
Consiguen que piense cosas raras, raras de la hostia.
Cuando despertó de su inconsciencia y estuvimos hablando...
No pude controlarme.
No pude controlar mis pensamientos ni mi cuerpo.
Estuve a punto de echar a perder el dominio sobre mí,  sólo por esa cercanía que había entre nosotros.
Esa puta cercanía tan temeraria.
Cada vez que cierro los ojos su pelo anaranjado aparece por arte de magia en mi cabeza.
Yo nunca he sentido apego hacia nadie, y era feliz así.
Claro, ha llegado Leo y ha hecho que mis planes se desbaraten.
¿Por qué él?
Un ardor sube por mi cuerpo cada vez que toco su mano, o pasa a mi lado.
O simplemente al pensar en él.
Nublándome los ojos y haciéndome pensar cosas, cosas singulares.
Cosas que nunca creí que entraran en mi cerebro.
No le tengo miedo a nada, joder.
No puedo dejar que Leo llegue a mi corazón.
Puede hacerme daño.
Y mucho.
Es como si...
Como si Leo se hubiera convertido en una especie de debilidad para mí.
Mierda, ya no estoy seguro de nada.
He empezado a sentir cosas tan raras... Mis esfuerzos por ocultar todo no dan resultado.
La barrera de neutralidad que he construido durante estos doscientos veinticinco largos años se está comenzando a desmoronar.
Y no con ritmo pausado y regular.
No, joder.
Rápido, velozmente.
Sólo una mirada de ese chico...
Y...
Me azoro, me hace perder mi serenidad.
Sus labios, esos labios rosados y carnosos que tanto me tientan.
Su cuerpo, sus pecas, su pelo, su pequeño lunar en el cuello, su clavícula...

Sé que yo también puedo descontrolarle.
Se le altera el pulso y la respiración se le torna irregular.
Veo todo, todos los detalles.
¿Desde cuándo eres tan detallista?
¿Desde cuándo eres tan cursi, Clarke?
Desde que Leonard llegó.
¿Y saldrá pronto?
No entiendo por qué, pero por primera vez temo algo, y es algo relacionado con una persona.
Creo que lo correcto sería dejar pasar esto, que a ambos se nos olvide el embrollo de ideas que tenemos en la cabeza.
Pero no, necesito... 

Estoy confundido.

Le voy a entrenar, voy a hacer que viva.

Creo que ese propósito es necesario para mí.

¿Leo como mi debilidad?
Jodidamente posible.

Cuando pase todo esto y si él sigue con nosotros intentaré dejar pasar un poco mis emociones a través del filtro de mi voz.
Noto cómo estoy cambiando de ideas.

Leo va a vivir.
Y yo... 

Joder, yo quiero estar ahí para él.

PD: Voy a dejar esta mierda, no soy una niñita de siete años escribiendo un maldito "diario secreto".

"Desearía que los sentimientos no se acaben...

...Qué no tuviera todas mis debilidades."


"Danger" (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora