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Ring, ring, ring

Ring, ring, ring

Ring, ring, ring

Desesperada por el inacabable irritante sonido me levanto del sofá y me dirijo a buscar el móvil que no sabía ni dónde había dejado.

Ring, ring, ring

Que sí joder que ya voy. Maldito soniquete de mierda.

Subo las escaleras de casa y llego a mi habitación, donde apoyado en la mesita de noche se encontraba el pesado móvil que no dejaba de sonar.

Miro la pantalla y veo que la llamada entrante es de Marcos. Toda una sorpresa puesto que casi nunca hablamos, no tenemos que se diga una relación muy cercana.

Descuelgo.

-¿Marcos?

No se escucha nada al otro lado del teléfono.

- ¿Marcos estás ahí?

Marcos seguía sin responder pero sin embargo esta vez se escuchaban golpes y murmullos.

- Ariana... Te...te...nemos un problema -trague saliva- Estamos en mi bodega Ruth, Isaac y yo. Han empezado a pasar cosas, la puerta está cerrada y hay alguien fuera golpeándola como si estuviese tirando cosas, no sé, piedras pesadas. Hemos preguntando quién había ahí pero no ha respondido nadie. No sabemos que hacer... -suena un golpe y un chirrido.

Trago saliva de nuevo.

- Voy para allá.

Cuelgo la llamada y sin pensarlo dos veces salgo de casa y subo en dirección a las bodegas. Cojo una piedra del suelo y me la guardo por si hay que usarla de arma.

Antes de definitivamente encaminarme a la bodega de Marcos tomo aliento y empiezo a subir.

Oigo los sonidos de algo golpeando contra la puerta de metal a medida que voy subiendo y también oigo pequeños gritos ahogados desde dentro de la bodega.

Entonces veo una sombra.

***
Narrador omnisciente P.O.V:

- Estoy a punto de un ataque de pánico- dice Ruth asustada.

- Tranquilízate joder fijo que no es nada- Isaac responde con cierto tono agresivo.

Pum, pum, pum

Más golpes contra la puerta.

Frustrado, Isaac agarra de la mesa un cuchillo y se encamina a salir fuera.

Ruth le agarra del brazo.

- Ni se te ocurra.

-¡No eres mi madre, suéltame!

- ¡No me grites así!

PUM
PUM
PUM

*ESTRUENDO*

La puerta se abre de repente.

***

Ariana's P.O.V:

- ¡¡Eh tu!!!

Echo a correr, pero la sombra que tiraba piedras hacia la bodega de Marcos es más rápida y se me escapa.

Me quedo delante de la puerta, ya medio abierta después de tantos golpes y le doy una patada.

Nada, no se abre.

Otra. Tampoco se abre.

Otra.

Y entonces la puerta se abre y lo primero que veo es algo en forma de palo caer amenazante sobre mi.

PRETTY GOSSIP #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora