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-¿Has visto a Aida? Necesito hablar con ella ya- me dijo Isaac.

Isaac había venido hacia mi tras mi salida del bar.

A pesar de que sí la había visto, le dije que no tenía ni idea de dónde narices estaba. Me sentía mal por mentir, pero prefería no dar detalles.

Y con eso y un bizcocho me aleje y dejé a Isaac por ahí buscando a Aida como un tonto.

Me puse a pasear sola por la zona, viendo las estrellas, pensando en mis cosas... Así tranquilamente.

Alguien me tocó el hombro por detrás y cuando me giré vi a Blanca.

Se puso a caminar conmigo. Estuvimos un rato calladas, simplemente observando el cielo y relajadamente.

- ¿Sabes? Cuando miro a las estrellas me rayo mucho- dijo ella- No sé, es como que empiezo a pensar en mis cosas y pienso más de lo que debería, llego a conclusiones que no suelo pensar durante el día y cosas así. Mirar las estrellas es como una forma de darme cuenta de X cosas que ignoro o me niego a mi misma.

Wow, realmente acababa de hacer todo un monólogo. En parte me sentía identificada con lo que acababa de decir, pero al igual que ella prefería no pensar en esas cosas, ya que esas cosas te hacían pensar aún MÁS.

-¿Y ahora, en que piensas?- pregunté.

- Fuah bobadas. Teorías, cosas que creo que me pasan pero que no estoy segura. Tía no se, chorradas.

Levante una ceja y le di un codazo.

- Blanca tía dime algo jajajajaaa, sorpréndeme con esas cosas que crees que te pasan pero que no estás segura.

Ahogó una risita y se tomo un tiempo para pensar si contarme algo o no. Al final parecía que cedió.

- Va no sé ¿Nunca te has preguntado si crees que te gusta alguien o te atrae o empiezas a sentir algo, pero no estás seguro y puede que en verdad no sea así pero puede que sí? Va chorradas.

Parpadeé seguidamente y rápidamente.

- Bueno... La verdad es que no estoy segura. Puede que me haya pasado pero no sé que decirte- me reí- Lo dices por alguien en concreto imagino, ¿Le conozco?

- Puede... Es que mira igual no es nada pero hay veces que pienso que este chico me atrae aunque sea un poquito. Dios parezco boba.

No parecía boba. Me moría de ganas de saber a quién se refería, sí era del grupo o era otra persona.

-¿Quién es?- le pregunté entonces.

- Uffff... Mmm... Es que me da vergüenza ay. Ay a ver. Es que no es fijo, osea no me gusta ni nada o sí, no se. A ver creo que no, creo que es solo atracción o algo así. Puff a ver, hablo de Isaac. Ay mira que vergüenza.

QUÉ

NARICES

?

ISAAC

ISAAC

NO ME LO ESPERABA

PERO PARA NADA

-¿Isaac?

- Isaac- repitió.

******

-¿Y la chica esa, la pelirroja?- pregunto entonces ella.

-Quién, ¿Ari? No pasa nada con ella, solo somos amigos.

Dama asintió ante la respuesta de Rodri.

- Te lo juro. Entre Ariana y yo o cualquiera de las chicas de mi grupo te puede asegurar que nunca hubo nada, ni hay nada ahora.

Ella volvió a asentir y luego le sonrió. Acto seguido le besó.

¿Quien iba a decirlo? Un chico de otro grupo distinto al suyo, que casi acababa de conocer, era el chico que desde el primer momento le robó el aliento, que la hacía sentir mariposas cuando le veía y que ahora era el mismo que la besaba y que parecía sentir la misma atracción que ella.

¿Tenían un rollo entonces? ¿Iría en camino de algo más serio? En esos momentos eso daba igual, solo importaba que estaba ahí, con él, solos, juntos, saboreando sus labios.

Rodri sonrió.

-¿Qué?- preguntó ella curiosa.

- Nada, nada. Es que de lo que te conozco me pareces una chica increíble- se calló un rato y sonrió de medio lado- Y preciosa.

Ella le abrazó.

Mientras que estaban abrazados Rodri vio a alguien de su grupo pasar; Paula.

La imagen que vio de ella fue algo que nunca se hubiese imaginado.

Paula iba con un peta en la mano, iba dando tumbos sin sentido de un lado a otro, apenas se mantenía en pie. Estaba muy pálida, pero empezaba a coger un color extraño.

El chico se soltó rápidamente del abrazo, se levantó y se dirigió hacia a ella.

- Paula ¿Qué haces? ¿Estás bien? Me cago en todo ¿Desde cuándo fumas? Porros encima.

-¿Quieres?- preguntó ella entregándole el porro a Rodri y medio sin sostenerse en pie.

Él le tiró el peta al suelo y ella se puso a gritar como una loca histérica.

Rodri la agarró de los brazos.

- Paula, te estás poniendo de un color amarillo muy feo, no me gusta nada esto. Te lo digo en serio

Ella volvió a gritar que le dejase en paz pero él no cedía.

Rodri intentaba hacerla entrar en razón pero Paula seguía dando tumbos sin sentido y se escapaba de él.

La chica hizo el amago de prenderse otro porro pero él no la dejó.

- Rodri, te juro por Dios que como no me dejes en paz...

Paula no pudo acabar lo que iba a decir. Sin previo aviso, vomitó.

Dama se levantó rápidamente del banco y se acercó a ellos.

- Madre mía ¿Está bien?

Rodri negó con la cabeza.

- No. No tiene pinta.

- Podemos llevarla a mi casa si quieres. Necesita descansar y beber agua o algo nose, algo- dijo Dama nerviosa.

Paula volvió a vomitar. Al acabar empezó a tambalearse, se le empezaron a cerrar los ojos, empezó a adquirir un color más y más blanco, cada vez más blanco; hasta que al final acabó por desmayarse.

-¡Joder!- gritaron Dama y Rodri al unísono.

****

Blanca y yo ya habíamos vuelto con nuestros amigos y estábamos organizando las sudaderas de nuestra peña.

Todas las peñas de todos los pueblos de alrededor tenían sus propias sudaderas, así que nosotros estábamos acabando de hacer el diseño de las nuestras para por fin tenerlas en mano.

Serían verdes militar, este color que dicen caqui. En lado izquierdo superior habría una V mayúscula por Valdilla, abajo donde el bolsillo nuestro nombre en mayúsculas también y por detrás el dibujo de una vaca loca debido a una larga cómica historia de nuestra grupo.

Estábamos mirando dibujos de vacas locas en internet y Blanca había seleccionado una.

- Venga hombre, esa es una basura no me toques los cojones Blanquilla- dijo Isaac de risas.

-Si no tienes- respondió ella vacilona.

Isaac se incorporó un poco.

-¿Qué no que? No me tientes a enseñarte donde están.

- En ningún lado.

Isaac le agarro la mano con intención de dirigírsela directamente hacia sus queridas partes. Empezaron a forcejear.

Fue entonces cuando llegaron Dama y Rodri con Paula en brazos.

-¿¡Qué ha pasado?!- preguntó Blanca atacada.

- Le ha dado un amarillo- respondió Rodri.

Lo que faltaba.

PRETTY GOSSIP #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora