Capítulo 36

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-NARRA EUN KI-

Tan solo quisiera no volver a verlo durante mi embarazo. Solo quiero sentirme tranquila ante la idea que es su hijo y no puedo ni siquiera decirle. No pude callar que lo amo y su respuesta me hizo sentir tranquila, pero todo me hacía sentir mal. Me regresé luego de que sequé mis lágrimas, luego de verlo alejarse con enojo de mí. No me sentía bien, me quería regresar y no dude en pedirle a Youngmin que me llevara de regreso. Tomé mi cartera y sin mirar atrás salí de aquel lugar. De camino al auto, Youngmin me detuvo y trató de saber que me pasaba ya que andaba con tanta prisa que parecía una loca.

YM: ¿Qué te pasa? – preguntó al detenerme

Lo miré y no pude ocultar que estaba llorando. Mis palabras no salían y solo pude llorar. Aunque Youngmin no me ha reclamado por esta locura que estoy haciendo, sé muy bien que le lastima verme llorar, pero no podía evitarlo. Necesitaba desahogarme, necesitaba gritar y ser escuchada. No tardó en abrazarme luego que me vio llorar. No dude en explotar y expresar sin miedo lo que sentía.

YM: ¿Discutiste con Kwangmin? – preguntó

EK: Si – respondí llorosa

No reclamó nada y solo me dejó llorar hasta calmarme. Lentamente empecé a sentirme mejor, pero aún seguía un gran agujero en mi pecho, el que me hacía sentirme todo el tiempo triste. Mi doctor me pidió que evitara emociones fuertes como la tristeza, pero este sentimiento me quema por dentro.

-NARRA KWANGMIN-

Me alejé de ella. Estaba tan molesto que por mi cabeza solo pasaban insultos contra ella, pero no podía abrir mi boca para herir a la mujer que amo. Me regresé para disculparme y salir de regreso. De camino a la puerta principal de la mansión, Raquel me detiene.

Raquel: ¿Qué te pasa? – pregunto

KM: Solo déjame tranquilo – pedí

Raquel: ¿Estas molesto con la idea que Eun Ki espera un bebé de tu hermano? – preguntó en tono sarcástico

KM: Te dije que me dejes tranquilo – insistí pedir

Raquel: Al final de cuentas, terminó sacando su verdadero yo. Una cualquiera, que se besa con su hermano mientras se acuesta con el otro. No tiene vergüenza – dijo para interrumpirla

KM: Eun Ki no es una cualquiera. Eun Ki es mucho más mujer que tú y averiguaré que me oculta y te lo vendré a restregar en la cara – dije molesto

Me alejé de Raquel ya que me hacía molestar su presencia. Caminado para llamar a mis padres, veo a Eun Ki abrazada a mi hermano. Por momentos pensé en salir corriendo para saber qué le pasa, pero luego recordé que quien debe estar cerca de ella es Youngmin, el padre de su bebé. Mis padres no tardaron en venir a buscarme para regresarme a la casa donde convivo con los demás. Antes de entrar en marcha, mi madre no tardó en reaccionar al ver a mi hermano abrazando a Eun Ki. Rápido se bajó del auto para reclamar lo que veía. Yo solo quería regresarme a la casa y me bajé para pedirle a mi madre que se hiciera de la vista larga pero solo tuve que sentarme a escuchar sus palabras que eran más un insulto.

Madre: ¿Se puede saber qué haces abrazándola? – pregunto molesta

YM: Mamá, por favor, nada es como lo piensas – respondió

Madre: ¡Ah sí! pues empieza explicándome que haces abrazándola – insistió en preguntar

Eun Ki se levantó y lo primero que destacó fue su rostro lloroso. No pude evitar mirar e intentar interpretar su expresión. Se veía muy triste y su rostro estaba muy lloroso. Lagrimas seguían saliendo de su rostro expresando que aún no podía dejar de llorar. Mi madre en ningún momento se fijó en cómo se veía Eun Ki, solo se dedicó a insultarla.

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