Solo Soy Una Empleada ||→m.b [Adaptación]

Capítulo 64

____ abrió la puerta de su casa cuidadosamente, evitando provocar algún tipo de ruido alto, pensando en que, probablemente, su familia estaría dormida, pero al abrir, se encontró con ellos y vio que apenas tomaban la cena.

Al ver qué ninguno se sorprendió con su llegada, la chica se sorprendió bastante, pues siempre esperaba ver una pequeña sonrisa en el rostro de su familia a la hora que los visitaba, sobre todo porque últimamente no pasaba el tiempo suficiente con ellos por el tipo de trabajo en el que estaba.

Cuando se adentró al comedor, su hermana la fulminó con la mirada, de manera desaprobatoria; su madre la veía de reojo y continuaba comiendo, al igual que su padre. ¿Qué les pasaba?

—Buenas noches, familia —saludó cordialmente, a pesar de no recibir una pronta respuesta por parte de ellos. Dejó sus maletas a un lado y colgó sus llaves junto a la puerta, en el pequeño objeto donde las colocaban normalmente. —¿Todo está bien? ¿Por qué ninguno me responde?

—Hoy no pude asistir a mi clase de rehabilitación porque NADIE se tomó el tiempo de llevarme —recalcó la palabra "nadie", ya que era verdad, su hermana había prometido llevarla a su clase el día de hoy, pero no pudo. Ahora entendía el enojo de sus padres y hermana.

Pero, ¿Cómo se le pudo olvidar aquel importante compromiso? ____ se había olvidado por completo de la rehabilitación de Janet.

—Oh por Dios —cubrió su boca con una de sus manos, avergonzada. —Janet, lo siento mucho cariño, ¿Cómo pude olvidarlo?

—Hija, sabes que nosotros trabajamos todo el día para poder salir adelante, tú también, y no te reclamo por eso, pero tú puedes pedirle permiso a tus jefes de que te dejen salir un rato, nosotros no podemos darnos esos lujos —señaló a su esposo mientras continuaba explicando a su hija.

—Lo lamento mucho —respondió apenada, un nudo cae formaba en su garganta. Se sentía muy mal por haber olvidado llevar a su hermana a su rehabilitación.

—Ya hija, no importa. Ya pasó —le dijo su padre, tratando de calmar un poco las cosas. ____ había cometido un pequeño error pero ya pasó.

—Prometo que no volverá a pasar, lo juro —su voz sonó entrecortada, pero no dudó en su respuesta.

—Está bien, hermana, te perdono. Cualquiera comete errores, así que ya no te preocupes —habló su Janet, mostrando una sonrisa ladina a ____.

La chica, con el corazón más aliviado, se acercó a su hermana y la abrazó afectivamente. Cada día que no la veía o pasaba alejada de ella por mucho tiempo, se convertía en un martirio. Todo el tiempo extrañaba a su pequeña hermana, quien era la persona más especial en su vida, junto con sus padres.

—Te extrañé mucho, Janet —depositó un tierno beso sobre la frente de la menor.

—Yo te extrañé más, ____ —la abrazó con más fuerza, mostrando una amplia sonrisa y cerrando sus ojitos.

—¿Cómo están ustedes? —le preguntó a sus padres, separándose un poco de su hermana.

—Con mucho trabajo, como siempre —suspiró su madre. —Pero estamos muy bien.

—¿Quieres cenar algo, hija? —preguntó su padre. —Te ves mucho más delgada últimamente, ¿Segura que te alimentas bien en aquella casa? —Cuestionó su padre, viendo a su hija. ____ amaba el que sus padres se preocuparan por ella aún.

—Por supuesto que estoy comiendo bien —rió. —Y claro que les acepto algo de cenar, muero de hambre —mantuvo su amplia sonrisa en la comisura de sus labios.

____ se unió a la cena. Extrañaba pasar el tiempo así de bien con su familia. Todos estos pequeños momentos eran sumamente especiales para ella, los disfrutaba al máximo, pues no sabía cuándo volvería a tener días así de felices con toda su familia reunida nuevamente, así que por eso se tomaba el tiempo suficiente para platicar y convivir con sus padres y su pequeña hermanita.