T2. Cap. 9

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—¿Te acuerdas el día que Johnny te dejó en tu casa cuando saliste del hospital?,–dijo tomando un sorbo de su café.

Estábamos en una cafetería, era viernes y lo único que quería hacer era echarme a dormir.

—Me dijiste que estabas toda nerviosa porque Matty los había visto a los dos juntos, sonriendo.

Yo solo asentí con mi cabeza, dándole un sorbo a mi té helado.

—Bueno... me puse a pensar, ¿qué pasaría si Matty fuera malo?

Hice una cara de confusión, y al parecer ella lo notó.

—Ya te he dicho que dejes de imaginarte cosas estúpidas, Ruby.

—Dijiste que mis papás y mis hermanos no fueron a verme al hospital cuando yo estaba, lo cual NUNCA pasó.

—También dijiste que Matty los había matado con K. Y que eran novios, y que yo entré en un estado depresivo–lo cual no es cierto porque soy más feliz que una lombriz.

—¿Qué tanto pasa por tu mente Turner?

—¡Tn-n!,–dijo Ruby, ahogándose con su croissant.

—En serio, todo pareció real. Hasta podía ver tus pensamientos, te sentías toda deprimida y no querías salir a comer.

—Déjame ver si entiendo. ¿Mis papás y hermanos murieron porque Matty y K los mataron?

Ruby solo asintió.

Antes de que pudiera hablar, hablé.

—Para empezar Turner–dije dando un suspiro–K ya no vive en LA, ¿ok? Se fue de intercambio a Australia. Matty está ocupado–no súper ocupado. Muy apenas tuvo tiempo de venir a verme al igual que mis padres.

—Por último, todas estas dos giras me has estado diciendo tu sueño–el cuál era indirectamente sobre ¿mi? Ahh,–dije haciendo un tono de frustración.

Ruby soltó una pequeña carcajada, y habló.

—Sentí que todo era real, hasta yo podía sentir el dolor. Pero bueno, dejemos eso atrás.... te tengo una sorpresa.

—¿En serio? Y se podría saber...¿sobre qué?,–dije arqueando una ceja.

—Si te digo, ya no será una sorpresa,–dijo Ruby, en un tono burlón.

—Solo arréglate. Mañana 7PM, en esta misma cafetería.

—¿Para qué me arreglo si sólo iré a tomar un café?,–dije rodando mis ojos.

—Además,–continué hablando–Ni si quiera sé con quién vendré a tomarme el café. A la mejor es un secuestrador o no sé.

—No seas paranoica Tn.

—Lo dice la que inventó una historia sobre la muerte de mi familia y depresión,–dije rodando los ojos.

—En serio Ruby, estoy segura que podrías ser una gran escritora algún día con esa imaginación que tienes–dije riendo.

—Y yo estoy segura de que podrás ser una gran abogada con esa boca tuya. Siempre discutiendo,–dijo Ruby rodando los ojos.

***

Ya eran las 6:50 y aquí estaba yo toda desesperada buscando que ropa ponerme. Sentía que todo me daba vueltas, me dolía la cabeza y el estrés parecía tomar control de mí.

Mi primer amor | Johnny Orlando.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora