ESTÚPIDO (ADA#2)

Capítulo 23

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-Pequeña – llamó Inuyasha antes de partir hasta su suite mientras miro a su hijo de reojo, Haru veía entretenido la televisión, Bankotsu se había marchado hace unos minutos – Hay algo de lo que tenemos que hablar –

-Mmm... esas palabras no son buenos augurios, pero teniendo en cuenta que no somos nada, adelante dilo – sonrió con picardía la azabache.

-Bueno... Haru ¿Estás consiente de que Haru te ha llamado... mamá? – le susurro despacio temiendo que su azabache volviera a reaccionar como la última vez. 

-Sí, lo sé. Y me he sentido bien Inuyasha, perdona si lo he dejado pasar pero es que... quiero un montonazo a Haru y escucharlo llamarme así... me ha embobado. Pero lo importante es tu opinión ¿Qué piensas tú?

-Que tengo que casarme contigo lo más antes posible – susurro rápido acercándosele como un depredador.

-¡Ay Inuyasha! Hablo enserio – le golpeo con nada de fuerza en el hombro del peli plata.

-Y hablo enserio, muy enserio Kagome – la tomo de la cintura acercándola a su cuerpo, apretándola contra él, sin intención de dejarla ir, Kagome lo miro enamorada, atontada – Se mi novia hoy y mañana mi esposa pequeña.

-Inuyasha... – la declaración del peli plateado la dejo sin aire, su mente en blanco sin dejarle algo claro que responder, abría su boca y la cerraba sin poder decir nada.

¿Su novia? ¿Su esposa? Era lo que más anhelaba ¿Entonces porque no decía nada?

-¿Qué respondes? – insistió notablemente nervioso Inuyasha ¿Por qué su azabache no respondía?

-Tú novia, sí. Tú esposa, otro día – y con aquella respuesta se lanzó a los labios de su ahora novia.

Un beso idéntico al del hospital, suave y lento, deseado y anhelado. Ahora no tenía que desear ni imaginar un beso del otro, cuando quisieran solo tenían que pedírselo. Kagome intento intensificarlo pero recordó al pequeño que estaba en su sala por lo que bajo su ritmo y trato de calmar su deseo al querer a Inuyasha completamente a su disposición.

¿En cuánto tiempo no había tenido sexo? ¿Cuánto paso desde la última vez que hizo el amor con alguien? Claramente más que un puto año, se sentía una niña inexperta en la materia, pero deseosa de tener desnudo a Inuyasha pegado a su cuerpo delgado y curvilíneo, todas esas sensaciones le hicieron recordar a su primera vez, en lo cual lo gracioso, era que su primera vez había sido con el apuesto peli plata.

-Pronto tendremos nuestro momento especial – susurro Inuyasha robándole un casto beso. Tomo de la mano a la azabache y se dirigieron a la sala en donde estaba el pequeño.

-Espera – lo detuvo adivinando sus intenciones – Deberías de tener esta charla solo con él, tú y tú hijo, solo ustedes dos Inu – aconsejo.

-Está bien, nos vemos mañana pequeña -

-Okey, nos vemos mañana – le brindo otro beso casto sonriente.

Y sin pedir ni reprochar más, Inuyasha llamo a su hijo, se despidieron de Kagome y se marcharon de la suite, llegando a unos pasos a la suya, al estar Inuyasha en su suite ya extrañaba a su azabache a pesar de que estaban separados por una delgada pared, la extrañaba. Su hijo se fue directo hacia el baño a lavarse los dientes mientras su papá pensaba en cómo hablar con su hijo. Pero no sería difícil, Haru amaba ya a la hermosa Higurashi.