Los ladridos de un perro sonaban por todo el edificio. Y esto molestaba demasiado a nuestro enojón protagonista Zack. Quien llevaba horas sin poder dormir.
— ¿¡Por qué rayos dejaron meter un perro al edificio!?
— Zack... ¿Aún no te duermes? – Ray tallaba con su mano sus ojos, el grito de Zack la había despertado.
— No, ese perro no deja de ladrar.
— Ya veo... – Ray volvió a acomodarse en la cama, ignorandolo. – Solo... No lo mates, por favor. – Y volvió a dormirse.
— ... Ah~ no me ignores de esa manera.
Zack continuó la mayor parte de la noche mirando a la nada, controlandose para no ir al departamento donde se encontraba el perro para partirlo por la mitad.
Al día siguiente, una vez el sol estaba por salir, por fin el perro hizo silencio.
Zack cerró sus ojos y se acomodó en la cama junto a Ray.
* Ding Ding Ding Ding *
La alarma del celular de Rachel se activo.
— ¡Me lleva la...!
Zack no pudo soportarlo más, y lanzó el celular por la ventana.
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Zack y Ray: Nuestros Días Juntos.
HumorDespués de escapar del centro de rehabilitación, ambos pasan el día a día de diferentes formas en un pequeño departamento abandonado, mientras se ocultan lo más que pueden de la policía. Capítulos cortos de la vida de Rachel y Zack. * Capítulos de 3...