Zack y Ray: Nuestros Días Juntos.

Toalla

Rachel se encontraba acostada en su cama, hoy Zack había ido por las compras, y se estaba aburrida.

Había estado navegando por internet un rato hasta que se aburrió. Sin Zack a su lado nada era divertido.

— Creo que me bañaré.

Rachel entró al baño y se dió un baño rápido. Al salir fue directamente a su habitación.

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Mientras tanto, nuestro buen Zack subía las escaleras del edificio. No era que le pesará subir, sino que llevaba en ambos manos bolsas pesadas con comida. Y eso le estorbaba para correr, sobre todo porque llevaba una bolsa con huevos, una vez ya los había roto, y recibió un regaño plr parte de Ray.

— ¡Por fin! Jodidas escaleras.

Zack abrió la puerta y dejo todas las bolsas en la mesa.

— ¡Ray! Ya llegué. – Pero no hubo respuesta. – Maldición, ¿Dónde esta?

Camino hacia la ahora habitación de ambos y abrió la puerta de una patada. Dándole el susto de su vida a Rachel.

— ¡Oye! ¿¡Por qué no me contestas!?

Zack fijó bien su vista y vio que había metido la pata... Otra vez.

— ... Z-z-zack...

Ella se encontraba en toalla de baño acostada en la cama mirando su celular.

— ¡Agh! ¿¡Por qué mierda no te cambias primero!? – Zack tapó sus ojos y salió de la habitación.

— ¡Es tu culpa por tirar de un golpe la puerta! Ni siquiera preguntaste.