❛OO4. carnation

1.6K 250 263
                                    

Las jodidas ocho de la mañana. Hace un frío de mierda y salí poco abrigado. Es a penas la primera prueba y ya me estoy arrepintiendo de haber aceptado ayudarla.

Qué irresponsable por parte de la sacerdotisa también, dijo que a las ocho y no hay señales de ella por aquí. ¿Y si mejor me voy?

一¡Chan!一me doy media vuelta para examinar quién ha sido la persona que me ha llamado. Resulta ser el chico de las pinturas一¿Alaska no ha llegado aún?

一Como puedes ver一señalo con mis brazos la puerta cerrada de la capilla一. No está aquí. Regresa a casa. 

一Qué va一se sienta al lado mío一. No creas que me voy a rendir tan fácil. La sacerdotisa me gusta. 

Casi me atraganto con mi propia saliva. Seungmin y yo a penas hemos conversado formalmente anoche y así de la nada me confiesa sus sentimientos por Alaska. 一Ah, okay. Pero hubiera sido mejor si te hubiera preguntado. 

一¿A ti no te gusta? 

一No一respondo monótonamente一. Y aunque fuese el caso de que sí, ¿por qué tendría que decirte? 

Alaska es...cómo describirlo. 

En fin, poniéndolo de forma simple: no es mi tipo. 

Si bien físicamente es atractiva, su personalidad y su manera de expresarse realmente no me gustan. Es peculiar, algo impredecible y a penas la conozco. No me veo en una relación con ella. De todas maneras, no creo que la ética de sacerdotes 一o como se le llame a esa mierda一  le permita estar en una relación. 

一¡Qué bien!一Seungmin salta un poco sobre su asiento y prosigue a remangarse la camisa desordenadamente, tratando de disimular las manchas de pintura que se veían frescas一Sé que a penas nos conocemos, pero eventualmente vamos a tener que ser amigos si vamos a estar trabajando juntos. 

一Ve directo al grano一me quejo mientras apoyo mi quijada encima de mi mano.

一Ayúdame a conocerla mejor. He intentado hablarle pero no da muchos detalles sobre su vida o qué hacía antes de llegar aquí. ¿Tú sabes algo de ella?

一Primero, respira. Hablas demasiado rápido, que he tenido que procesar todo lo que acabas de declarar一sobo mi sien con mi dedo índice y el del medio. Este chico es realmente estresante y hiperactivo para mí一. Segundo, no sé nada de ella. Estoy en blanco...

一Uhg, qué complicado一suspira y lentamente se recuesta sobre el piso, sus piernas cruzadas一Pero debo admitir que me gusta así. 

一No me cuentes tu vida一respondo, un poco perturbado. 

La puerta se abre de golpe y lo siguiente que escucho es un breve llanto de dolor por parte del muchacho menor. Al darme la vuelta, resulta que Alaska ha abierto la puerta y sin querer, el borde de la puerta le ha dado en la cabeza al pelirojo. Le dio tan duro que incluso los lentes del herido cayeron al suelo. 

一¡Ay, discúlpame!一Alaska se agacha al lado de Seungmin y le acaricia un poco en donde ha tenido la desdicha de recibir el moretón一No pensé que estarías acostado ahí. ¿Desde hace cuánto están aquí? 

一Por todo lo que sé, de seguro media hora一replico amargo y me pongo de pie一¿Iniciamos ya? 

一Seguro, pero primero déjame revisarle la herida a tu compañero. Creo que le di muy duro. 

一No, no. Estoy bien一Seungmin se esfuerza por hacerse el fuerte y aparta con cuidado la mano de Alaska一. Podemos empezar ya. 

一Sí así lo dices...

A partir de ese momento, no me imaginé que iba a ser tan agotante ser el ayudante de una sacerdotisa. Además de agotante, también aburrido. Nos empezó a enseñar las bases sobre el orden sacerdotal 一porque dice que ella que todos sus ayudantes deben saber al menos algo básico一 y otras porquerías que ya a las doce del mediodía ni me acuerdo. 

一Pueden tomar un descanso一tan alegre, tan jodidamente radiante después de una jornada pesada y desganada一. Voy a ir preparando las siguientes actividades. Ya estamos por terminar. 

La atención que Seungmin le ha estado ofreciendo a la sacerdotisa durante todas las horas de la mañana de hoy me ha hecho sentir un poco enfermo. Es tan...cursi. No sé por qué, pero me da la impresión de que Seungmin es del tipo que se enamora rápido. 

一Tiene bonitas piernas, ¿sabes?

一No quiero saber esooooo. 

一¿Es normal que siempre andes así de cabreado con la vida y misántropo?一su tono se vuelve agresivo一¿Para qué te tomas la molestia de haber venido? 

一Gracias por recordarme del más grande error de mi vida一contesto cáustico一. Primera y última vez que vengo aquí. 

一Puedes retirarte ya si quieres一un vil escalofrío cursa por mi cuerpo ante la repentina constentación de Alaska. Fallé en percatarme de que lo más probable era que nuestras voces resonaban por toda la capilla. Me cuesta unos milisegundos reunir el coraje de hacer contacto visual con la chica, pero grande es mi sorpresa al ver que Alaska está tranquilamente regando las plantitas en los marcos de las ventanas一. No estás forzado a quedarte. 

De forma súbita, me siento frío. Literalmente frío, sentía un raro temblor en mis manos. 一No, yo...

一Ambos están castigados por interrumpir la serenidad一detiene su atención en las plantas y levanta su dedo índice en el aire一. Espérenme en el cuarto al lado de la sacristía. 

¿De verdad nos va a castigar como si fuéramos unos niños pequeños? ¿Quién se cree ella? 

Mi compañero hace caso omiso a la orden de Alaska y yo automáticamente le sigo, dudoso. 

一¿Qué piensas que nos hará?一Seungmin de repente pregunta. 

一Qué voy a saber yo. ¡Es tu culpa! 

一¡No lo es! 

 一¡Claro que sí! ¡Fuiste tú quien comenzó a gritar allá!   

一Ya van de nuevo一Alaska entra al cuarto y deja la puerta ampliamente abierta, incluso llegando a poner un para-puertas一. ¿Ven todos esos libros en ese estante? 

Seungmin y yo asentimos. 

一Ordénenlos一es su simple mandato一. Para cuando regrese, debe estar impecable. 

Oh, sí. Qué divertido es esto de ser el ayudante de una sacerdotisa rara. 

 Perdí la noción del tiempo aquí adentro. La única noción que tengo es el dolor de espalda que me ha causado el tener que estirarme tanto para alcanzar las secciones más elevadas. 

一Chan一Seungmin me llama imprevistamente一. Ese libro azul se ve demasiado pesado y tengo miedo de que me caiga en la cara, ¿puedes sostenerlo por mí mientras agarro estos otros tres? 

一No.

一Oh, ¡vamos! Así terminamos rápido.

一¿Rápido? ¡Llevamos aquí como una hora y nada más hemos terminado con la mitad!  

一Qué exasperante es hablar y tratar contigo, por diooooos一desordena con frustración su cabello pelirojo一. Lo haré yo solo entonces. Si se me rompe la nariz o se me sale un ojo, es todo culpa tuya. 

一No seas miedoso, no te va a pasar nada. 

                                                  

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

                                                  

𝐑𝐄𝐍𝐀𝐒𝐂𝐄𝐍𝐓 𝐅𝐄𝐀𝐑𝐒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora