Seamos eternos (Completa)

54.¿Tendremos un niñero?

"Los queremos" , "cuidense" , "ya viene en camino quien los va a cuidar" fueron las palabras de nuestros padres antes de irse.

¿Es una broma?
No sería la primera vez que estoy solo, ¿por qué necesitaría alguien que me cuidara?

  Peyton estaba desayunando algo que le dejaron sus padres. Yo estaba en la sala viendo una serie.

  Sonó el timbre.

-Voy- dije.

  Me paré y al abrir la puerta... Estaba un universitario más alto que yo, castaño, ojos miel y con su chaqueta de su escuela. Volteé los ojos. Abrí la puerta completamente.

>>Pasa.

  Pasó y cerré la puerta.

-Esto es muy extraño -dijo-, creí que cuidaría a unos niños, no pensé que fueran grandes.

  Me senté en el sillón. Saqué un cigarro, lo encendí, le di una calada y lo dejé apoyado en el cenicero.

-Si, bueno, esto es lo que tienes.

-No deberías fumar.

-¿Por qué? Esta es mi casa y hago lo que quiero.

  Peyton salió de la cocina y el muy descarado se mordió el labio.

-Oh -dijo Peyton-, así que ya llegaste.

  Se acercó a ella y la agarró de la cintura.

Lo mataré, definitivamente lo haré.

-Sabiendo que cuidaría una preciosura como tú, lo haría más seguido.

  Me paré y aparté sus manos de Peyton.

-Normalmente no soy celoso, pero si te pido que no te acerques a mi novia, que seas mayor no significa que no pueda golpearte.

  Empezó a reírse.

-Como sea, primero vamos a desayunar y ya pensaremos en qué comer... Por cierto... Tengo tres reglas: la primera -alzo su dedo-, no quiero que me molesten mientras estoy en algo, ya son suficientemente grandes como para resolverlo solos... La segunda, no pueden hablarme si no lo hago yo primero... La última, no soy su amigo para darles consejos... Bien, vamos a desayunar.

-Vayan ustedes -dijo Peyton-, yo ya desayune.

-Como sea.

  Fuimos a la cocina. Al parecer cocinaba muy bien (obviamente no me cae bien, pero igual no podría negarlo). Desayunamos y al parecer se fue al cuarto de huéspedes.

***

¿Algo más molesto que tengas un niñero teniendo 17? Sí, que tu niñero invite a una chica a su cuarto y que no tenga el descaro de hablar bajo.

-¡Consiganse un hotel!- Grité.

  La cama siguió rechinando.

>>¡Si rompes algo tú lo pagas idiota!

-Déjalo Will -dijo Peyton-, igual no te va a hacer caso.

-Es mi casa, ni siquiera yo hago eso en mi casa.

-Es un asqueroso, no vale la pena. Ven, vamos mejor a comer.

-No creo que tenga hambre con todos esos gemidos.

-Podemos poner música.

-¿Qué más da? Vamos.

  Fuimos hasta la cocina. Peyton y yo cocinamos un poco mientras poníamos música en una bocina.

  Minutos más tarde llegó nuestro niñero todo sudado y con la chica.

-Gracias por hacernos de comer -dijo el niñero-, muero de hambre.

-Eso no es para ustedes -dije-, si tienen tanta hambre compren algo.

-Como sea.

  Los salieron de la casa.

-Paz -dijo Peyton-, por fin.

  Asentí.