Through the dark - Segunda parte de 'All their little things'

XV

 [Punto de Vista Judith]

- Así que está decidido.

No fue una pregunta. Moví la cabeza hasta convertir ese movimiento en una respuesta afirmativa y Rosa también asintió, asimilando mis palabras. El sol lucía en lo alto del cielo de Buenos Aires y tuve que cubrirme los ojos para poder continuar mirando a mi amiga, esperando su veredicto acerca de mi decisión.

- ¿Y es lo mejor?

Formuló una pregunta y suspiré. ¿Quién sabía a ciencia cierta qué era exactamente lo mejor para nosotros? A esas alturas, con tantas cosas cargadas a nuestras espaldas, cualquier solución podría convertirse en mala o buena dependiendo de un mínimo detalle.

- No sé si es lo mejor, pero así lo creo. No es una afirmación, sólo es una convicción personal -tomé un trago de mi zumo de naranja y respiré con fuerza-. Louis sigue siendo el mismo que me dejó, Rosa, y me da miedo pensar en qué puede pasar si no consigue disfrutar de un tiempo en el que pueda olvidarse de todo. Sólo quiero que vuelva a ser el mismo de siempre, sin preocupaciones ni miedos. No sé me ocurre de qué otra forma puede conseguirlo.

- ¿Crees que se enfadará?

- Claro que lo hará -me encogí de hombros-. Pero espero que acabe comprendiéndolo. Lo hago por nosotros. No soporto estar junto a él y verle de la manera en que le estoy viendo. Necesita despejarse, y estando con sus chicos es como mejor puede conseguir eso.

Reinó el silencio entre nosotras durante un par de minutos. Estaba decidido: me iría de allí el día siguiente, antes de que finalizara el concierto que tenían programado. Lo único que me quedaba por hacer era confirmar un cambio de billetes en el vuelo que, en principio, tenía pensado cogerme.

- Judi -miré a Rosa cuando reclamó mi atención y lo que me encontré en ella fue duda-. Yo también vuelvo a Londres.

- ¿¡Qué!? -Di un respingo haciendo que mi hamaca se tambaleara y su expresión arrugada consiguió terminar de asustarme-. Pero Niall y tú lo habíais arreglado, ¿no?

- Sí, pero tú tienes razón. Yo también quiero que disfrute, y que se relaje con sus chicos, y si estoy aquí no va a conseguir eso. No termino de estar a gusto, siento que no estamos como deberíamos estar, así que lo mejor que puedo hacer...

- Espera, espera -le corté-. Piénsalo bien. No tomes ninguna decisión precipitada. Antes de empezar la gira, y de venir aquí, estabais como nunca, ¿por qué ha cambiado eso?

- No tengo ni idea, pero ha cambiado -retiró su mirada de mí y la clavó en el frente, donde unas chicas que aparentemente tendrían nuestra edad nos miraban con atención-. Hablaré con él esta noche y se lo diré.

La observé preocupada. Lo nuestro nunca había sido tomar decisiones de este estilo, tan trascendentales. Decisiones que podrían cambiar el devenir de nuestra relación.

- ¿Cogemos los billetes de vuelta? -Pregunté, algo trastocada por lo que estábamos viviendo.

- Sí, vamos arriba. Cuanto antes, mejor.

Nos levantamos al mismo tiempo y cogí su mano cuando estuvimos frente a frente, tal vez intentando infundarle ánimos, tal vez intentando dármelos a mí sintiendo que tenía a mi amiga a mi lado.

- Va a salir bien -afirmé, quizá sin demasiada seguridad.

Apretó mi mano y sonrió.

- Claro que sí.

[Punto de Vista Liam]

Volvimos al hotel alrededor de la hora de comer y rechacé hacerlo con Zayn y Harry, que finalmente se unirían al resto del equipo para ello. Subí exhausto a la habitación, como si llevara días sin dormir.