XXVII. De tragedias personales y otras cosas.

597 101 40
                                    

Su "asombrosa noche de pasión" al mero estilo de una película pornográfica no duró demasiado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Su "asombrosa noche de pasión" al mero estilo de una película pornográfica no duró demasiado. Connor estaba dando largas zancadas en vez de pasos pequeños en este inexplorado mundo de las borracheras y Hank no estaba totalmente dispuesto a tener sexo con alguien que había caído inconsciente apenas tocó la cama.

Dormir abrazados sonaba bastante mejor, aunque en realidad era como si Hank hubiera puesto sus brazos alrededor de una inerte almohada como solía hacer en sus días de soltería. No le importó. La cercanía era todo lo que necesitaba luego de lo que vivieron los últimos meses.

—Esto es horrible. —Se queja Connor entre risas. Su voz ronca y adormilada, los cabellos castaños ahora estaban tan desordenados que parecían un nido de pájaros. Hank, que estaba despierto desde el amanecer, se ríe en voz baja.

Connor presiona sus manos sobre sus párpados como si eso pudiera controlar la migraña que martilleaba su cabeza. ¿Estaba agradecido por ser cada vez más humano? En momentos como estos lo dudaba.

Los gruesos dedos del teniente se pasan por los cabellos de su pareja en un intento de cepillarlos, aunque era más bien una serie de pequeñas caricias. Toma sus manos y besa sus nudillos con devoción.

—Intentaremos lidiar con tu resaca con el método humano. Si no sirve, llamaremos a Elijah. —Promete con voz cálida, como si estuviera hablando con un niño. Se dedica a besarlo en el cuello los siguientes minutos mientras trata de convencerlo para levantarse.

El desayuno es silencioso, y esa tranquilidad solo se ve interrumpida cuando las risitas tontas se escapan de entre los labios del androide cada vez que el teniente acaricia su rostro o pasa su mano por sus piernas.

Hank se sentía como un adolescente, incapaz de alejar sus manos del objeto de su deseo, y Connor simplemente se sentía amado.

Al anochecer vuelven al mismo lugar que el día anterior, comen de los más finos platillos y beben mientras la noche los consume. Aunque el teniente se sienta demasiado viejo, baila baladas románticas con el androide.

"Dijiste que te encargarías de enseñarme cosas que los humanos hacen" Dijo el androide castaño mientras hacía su mejor cara de gatito y lo jalaba del brazo hacia la pequeña pista donde solo un par de parejas también bailaban.

Hank no está muy seguro de lo que hacen. Piensa que serán observados ya sea por la diferencia de edad, porque lo dos son hombres o porque uno de ellos es el androide que fue acusado por asesinato hacía nada de tiempo. Sin embargo, nada de lo que temía sucede.

Será que todos están concentrados en sus bebidas, o en sus parejas, o en los potenciales acompañantes en la cama para esta noche, pero nadie posa sus ojos sobre ellos.

Ahí, en este hotel prestigioso y hermoso de Detroit, no eran más que una pareja de enamorados.

—No era el mejor bailarín en mis tiempos. —Comenta el teniente, carraspeando su garganta.

SERIAL KILLER || Hank X Connor [Detroit:BH]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora