Darrow Ackermann.
Muchos lo conocen por ser el hijo del rey de la mafia, sin embargo, la mayoría lo conoce por ser el príncipe de la fragancia. A sus 30 años el codiciado magnate ha sido reconocido por su exitosa empresa "FraGWorld".
Todo se hace a...
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La sonrisa no desaparece de mi rostro. Esto de verdad que se esta poniendo demasiado raro.
Miro atentamente cada parte de su cuerpo, no lo niego, esta chica es bastante hermosa.
Tomo un sorbo de mi copa y ruedo los ojos para volver a sentarme en los sillones.
Miro antentamente la pista, no dejo de observar en su dirección, observo cada paso que da y cada sonrisa que ofrece.
Enojada me gusta más.
Camina hacia una de las mesas y deja tres cervezas sobre la base. Sonríe de lado antes de darse media vuelta.
Uno de esos tipos tira a propósito su cerveza. La melena se da vuelta y los mira confusa. Estos le dicen algo por lo que supongo que ha de ser una disculpa.
Ella siente paciente y se acerca nuevamente hasta ellos, les da la espalda y se pone de rodillas par recoger los pedazos de vidrio.
Aprieto mi mandíbula al ver la expresión de esos depravados, los tres sonríen y la miran con lujuria.
Me pongo de pie alerta a lo que uno de ellos pretende hacer. Le toca el trasero con total tranquilidad.
La melena da un respingón y se pone de pie. Los mira con odio y estos no hacen más que reír, entonces hace lo que menos me espero.
Aprieta su puño con rabia y se lo estampa contra la cara del mal nacido. Este cae de su asiento e inmediatamente ella hace una mueca de dolor.
Les grita cosas que no llego a escuchar y dejándolos ahí como a unos idiotas se va con prisa y molestia.
No puedo evitar carcajearme ante su acto. Pero que chica...
Aparte de grosera y berrinchuda bastante peligrosa. Bebo otro sorbo de mi botella y mi móvil comienza a vibrar.
Lo saco de mi chaqueta y abro el mensaje que me acaba de llegar.
