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- Harry...

- ¿uhm?

- ¿Por qué no fue así desde el comienzo? -. Cuestionó acariciando el pecho de Harry -. ¿Por qué la vida ... nos cruzó en una circunstancia tan...

- ¿Mala?

Ella solo soltó una suave risa.

- ¡No! ... uhm no diria mala sino, extraña -. Lo miró, apoyando su mentón en el pectoral izquierdo del hombre -. Eras un tipo tan extraño...  -. Comentó con gracia -. Bueno, aún.

- Hey.

- Pasamos por tanto...  -.agregó.

- Lo sé.

- Te imaginas... si nunca te hubieran asaltado... si mi madre jamás se hubiera ... - hizo una mueca - ido, todo sería diferente hoy ¿no lo crees? Apuesto a que mi padre no se hubiera vuelto un alcoholico.. -. Uso su pecho como si fuera una comoda almohada, apoyando la mitad de su rostro sobre él.

-...

- ¿Harry?

- Dime.

- Aún piensas en ella.

- ya te he dicho que era solo una clienta ______.

- ¿Qué?... ¡No! No me refiero a...esa zorra -. Masculló. Harry sonrió ladino negando.

- ¿A quién te refieres entonces?.

- Tu sabes.

- Lo único que sé es que debes descanzar ahora.

Si, realmente él sabía a quién se referia.

- Harry... Si ella apareciera hoy... arrepentida... ¿Qué harias?.

Harry la miro por unos segundos y corrió la mirada. La volvió a mirar esta vez sonriendo suavemente.

- A dormir señorita -. Dijo envolviendola con las sábanas.

- No esquives el tema.

Harry apagó la lámpara y se acomodó en silencio a la par de la chica pero esta vez, dandole la espalda.

- ¡Harry! -. Exclamó azomandose, recargada sobre el brazo del chico-. ¡Te estoy hablando!

Y cuando logró ver su rostro. Esa mirada herida. Su silencio. La amargura que expresaba. Supo que aún le dolía, que esa herida aún no cicatrizaba.
Se quedó muda.

- am... Buenas noches -. Beso la mejilla de el contrario y se acomodó aferrandose a la manta, la cual sujetaba con fuerza entre sus puños, contra su pecho. Suspiró, herida.

Él aún pensaba en ella. Eso le había quedado bastante claro.

Harry se quedó mirando la pared durante un largo tiempo. Su alma estaba herida, perturbada. Jamás había entendido el por qué ... aquella cicatriz había devaluado tanto su valor para ella. Como por un jodido tajo en la cara, lo dejó de querer.

"Hoy, mañana y siempre"

"Te amo.."

"Lo siento..."

- Harry... ¡Harry!

Lo movió hasta que éste abrió sus ojos con sorpresa y espanto. Estaba sudando y su respiración estaba acelerada.

- Joder... -. Se dejó caer nuevamente sobre la cama y sobó su cabello cuando observó a la castaña-. ¿Qué hora es?

- oh uhm -. Observó el reloj -. Casi las cuatro.

Síndrome De EstocolmoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora