Capitulo 15

4K 345 20
                                    

El equipo avatar estaba sobre volando un gran y frondoso bosque sobre el lomo del gran bisonte volador. Hasta que el joven avatar vio un gran espacio de árboles incendiados, quemados, reducidos a cenizas. El bisonte Appa bajo, dejándolos en un claro donde no había rastro de algún tronco quemado. Aang estaba sorprendido por lo que la nación del fuego había hecho con ese lugar y después se sentó, como si estuviese comunicando con la tierra, como si la tierra le dijera algo.
- No puedo creer que la nación del fuego haga esto, es... terrible.
- Lo se Aang- lo consoló Katara- la nación del fuego a hecho cosas terribles , ellos me quitaron a mi madre- suspira.
- Si- dice ____- yo estoy comprometida con Zuko por lo mismo, por qué dejaran en paz a mi pueblo, a todas las tribus agua al igual que los maestros agua, de cualquier tipo.
- Creo que Zuko no está cumpliendo esa promesa.
- Ya no sé quién es ese chico, el no es de quien me enamore después de la muerte de Lu Ten.
- Solo está perdido _____ - me dijo mi amigo el pequeño monje- está confundido y no ha encontrado lo que es bueno para el, está segado por una idea falsa.
- Lo se Aang y me duele que no quiera escuchar.
- Vamos continuemos- dice Sokka algo impaciente.
- Claro, claro, vamonos- dijo su hermana.
- Necesito ayuda, se supone que como Avatar debo proteger la naturaleza pero no sé cómo.
- Para eso vamos al polo norte Aang, por eso vamos a mi hogar, para encontrarte un maestro.
- Lo se ____, pero nadie puede enseñarme a ser el avatar, el monje Yatsu dijo que el avatar Roku me ayudaría.
- ¿Hablas del que te precedió hace más de un siglo?- pregunto Sokka- pero ya murió ¿como se supone que hablaras con el?
- No lo se- Momo saltó a las piernas de Aang y este lo acaricio

- ¡Tio! ¿Donde estás?- decía cierto príncipe- el Avatar está cerca y no quiero perder su rastro, además ____ tiene que estar con el.
- Hola sobrino, no quieres unirte, el agua está en su punto, la calenté yo mismo.
- No tio, no quiero un baño relajarte, vamonos.
- Está bien- se levanta y estaba completamente desnudo a lo que Zuko se voltea.
- Bien, quédate unos minutos más.
El príncipe exiliado dio media vuelta y se marchó- te esperamos en 5 minutos tío, si no partiremos sin ti.

- Aang, ¿estás listo para animarte?- dijo Katara y le lanzó una roca a Aang.
- ¿Eso me tenía que animar?
Sokka estaba riendo a carcajadas y la princesa de la Tribu Agua le dio un golpe.
- ¡Oye! Está bien creo que me lo merecía.
- Aang mira lo que encontré.
- ¿Bellotas?
- Si, cada una de ellas se convertirá en un gran árbol algún día y los animales que vivían aquí regresarán, todo esto surgirá de nuevo.
- Gracias Katara- sonríe y llega un anciano.
- Mis ojos no pueden creer lo que están viendo, en cuanto vi al bisonte me pareció imposible, pero esas marcas, tú eres el joven avatar.
- Si, lo soy.
- Mi aldea tiene un problema, ¿podría ayudarnos?
- Claro ese es el trabajo del Avatar- dice Sokka.
Aquel anciano llevó a los tres viajeros a su aldea, donde le explicaron a Aang lo que pasaba, tenían un problema con un espíritu y con el solsticio que habita pronto no podían imaginar la destrucción que causaría, necesitaban detenerlo ya, además de que se había llevado a mucha gente de la aldea, la gente no salía, se quedaba escondida y necesitaban con urgencia al joven avatar, pues el era el puente entre el mundo espiritual y el mundo humano.
- Claro puedo intentarlo- dijo el joven avatar algo inseguro de su mismo y mirando a sus amigos.

Mientras tanto unos maestros tierra se habían encargado de capturar al general Iroh y llevarlo a la gran ciudad de Ba Sing Se.

Al anochecer Aang salió con su planeador y sin saber realmente qué hacer lo plantó en el suelo.
- Espíritu, por favor deja de aterrorizar a este pueblo.
Después de eso se dio media vuelta y el espíritu aún enfurecido empezó a destruir casas y construcciones, el joven avatar tratando de detenerlo, de hablar con el se llevó varios golpes terminando el en el suelo. Sokka aquel obstinado muchacho al ver que su amigo no conseguía nada salió corriendo con su boomerang en mano y lo lanzó atacando a aquel gran espíritu como si realmente le fuera a hacer daño, el sol estaba saliendo y el espíritu se llevó a Sokka, Aang abrió su planeador y salió volando detrás de aquella extraña criatura. Lo busco durante horas, pero encontró nada, así que decidió volver a aquella pequeña aldea para dar a Katara la noticia de que Sokka seguía desaparecido, pero al llegar y verla sentada junto a Appa empecé a hablar con la mala noticia más Katara seguía hablando con Appa.
- Tranquilo muchacho el volverá.
La princesa de la tribu se acercó con una cobija.
- Será mejor que descansen.
El joven Aang cayó en cuanta de que solo estaba en forma espiritual, entonces apareció el dragón que alguna vez fue el compañero inseparable de Roku. Aang montó al dragón el cual le mostró a Roku.

El general Iroh iba en una extraña ave rumbo a Ba Sing Se, pero no iba por gusto, pues unos maestros tierra lo habían capturado. Este en sus intentos de escapar logró quemarle las manos a uno de ellos.
- Avatar Roku- dijo Aang viendo la estatua de este dentro de un templo, en una isla de la nación del fuego. Vio imágenes del solsticio, de la luz del sol pegando en la estatua del avatar anterior. Entonces Aang salió del trance justo al atardecer, planeó a la aldea, encontrándose con el Hei Ban tocando su frente lo hizo tranquilizarse un momento y empezó a hablar con el.
- Se como te sientes, yo me sentí igual cuando vi el bosque destruido por la nación del fuego, pero después Katara y _____ me dijeron que el bosque volvería a crecer y es cierto, solo es cuestión de tiempo.
El Hei Ban se convirtió en un panda, dio media vuelta y se fue, dejando en la entrada de la aldea unos bambúes de donde salieron todas las personas desaparecidas, incluyendo nuestro sarcástico amigo Sokka.

Cierto príncipe exhiliado vio a un bisosnte volador atravesar el lugar, pero iba al lado contrario de donde el encontraría a su tío, pero sin pensarlo dos veces fue donde su tío, dejando ir al bisonte, donde estaba Appa, el Avatar que le traería una cálida bienvenida y _____, la única razón por la que se esforzara más de lo necesario.

Amor por compromiso (Zuko y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora