Mortales Insoportables: Sin Niebla

[-20-] La Venganza

(Le cambié el nombre a Jesús, ahora es Mateo (Theo)
Thelena, el próximo es Caleo, es que tenía una idea pero se me ocurrió mejor está y ya no sabía como continuar el Caleo que tenía planeado así queeee...Thelena para todos ustedes.

Pregunta, soy la única que se imagina a Theo como Noah Centineo? 🧡

Pov. Elena

Escupí el agua que estaba tragando al escuchar el nombre de mi padre salir de la boca de mi maestra de historia.
-¿Señorita Jackson? ¿Algún problema?- Preguntó la maestra.

-No...solo me ahogue- Dije sin importancia limpiando mi boca con la manga de mi chamarra.
-Sí claro, seguramente hizo conexión con su padre y por eso se sintió especial- Dijo Maya mirándome con burla.

-Hey, es cierto...¿Tu padre es Percy Jackson no?- Preguntó la maestra.
-¡NO! Es...Peter Jackson- Dije recordando el apodo que el Sr. D le tenia a mi papá...espero poder salir de esto pronto.

Supongo que era una desventaja de que los dioses se hayan revelado...uno empieza a ver historia sobre las más recientes guerras y allí está tu papá siendo uno de los protagonistas en ambas guerras. Lo normal.

-Estoy bastante segura de que es Percy...- Dijo la maestra mirándome con curiosidad.
-No...¿Yo? ¿La hija de un semidiós muy poderoso? Si...claro- Dije con sarcasmo riendo nerviosamente. No era buena mintiendo no es mi culpa.

La maestra iba a decir algo más pero sonó el timbre, inmediatamente agarré mis cosas y salí de aquel salón soltando aire que no sabía que tenía.

Mierda, estuvo cerca.

-Por favor, tú, ¿Hija de dos grandes semidioses? No solo eres una zorra, también una mentirosa- Dijo Maya mirándome con burla.

-No soy hija de semidioses Maya...- Dije mirándola frunciendo el techo intentando esquivarla para ir a mi siguiente clase.

-Eso es bastante obvio, pero que te quede claro que tú no eres nadie especial- Dijo antes de girarse y caminar lejos de mi haciendo sonar sus tacones por todo el pasillo.

Si tan solo supiera...

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Un sonido proviniendo de mi ventana interrumpió mi tarea. Fruncí el ceño antes de asomarme a mi ventana encontrándome con un Theo sonriéndome.

Inmediatamente abrí la ventana.
-¿Qué haces en mi ventana?- Pregunté confundida.
-¿Sorpresa?
-Theo
-¿Puedo pasar?

-Ya que- Dije alejándome de la ventana dejándolo pasar.
-Gracias- Dijo entrando a mi cuarto mirando a todos lados.
-¿Me dirás por que estás aquí?

-No dejaba de hablar de ti y Tobías me trajo volando y literalmente me aventó en tu techo...
-Awww que lindo, pero estoy algo ocupada. Tengo tarea- Dije señalando mi escritorio donde estaban mis libretas y libros.

-No es solo eso...tienes esa mirada que dice "Estoy preocupada por algo y no sé qué hacer"- Dijo cruzándose de brazos mirándome fijamente.
-Yo...Mierda, como me conoces- Dije sentándome en la orilla de mi cama, dos segundos después Theo estaba al lado mío.

-¿Qué pasa princesa?- Dijo agarrando un mechón de mi cabello colocándolo detrás de mi oreja cariñosamente.
-Mi maestra de historia cree que mis papás son semidioses...ya sabes, los de la profecía y eso...

-Pero lo son...
-Exacto, y si lo llega a descubrir estaré en problemas.
-¿Por?
-Toda la escuela se enterará...seremos fenómeno mundial o algo así no lo seeee- Dije dejándome caer en la cama con los brazos extendidos.