🌿 Capítulo 22

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Final del capítulo inesperado porque la neta no sé de donde salió eso xD

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Lo que pasa en el baño, se queda en el baño.

...

—No entiendo por qué Balthazar vive en un rancho—habló Castiel mientras miraba por la ventanilla.

—Lo sabrías si te dignaras a llamar de vez en cuando—masculló Gabriel con la boca llena de M&M's haciendo que algunos cayeran al asiento—Balthazar y Lisa son veterinarios.

—Pagarás el lavado de mi auto, Gabriel—gruñó Charlie mientras seguía los señalamientos—Eres un asco comiendo.

—Parte de mi encanto.

Uno pensaría que pasar quince horas de viaje en un auto con dos gatos, una chica que posiblemente ande en sus días, un chico cuyo ego es comparable con el de un dios y un chico con el autoestima por los suelos no terminaría bien. Pero aquel trío nos sorprendía de nuevo haciendo que un viaje de carretera se disfrutara mucho en compañía del otro.

Wyoming es un estado del oeste de Estados Unidos que se caracteriza por las Montañas Rocosas y las bastas llanuras. Castiel debía de admitir que en sí no había nada interesante en el lugar como miles de edificios, grandes museos y cines y escandalosos bares como a Tim le gustaban; era una zona donde podías apreciar los pastizales mecerse con el viento y al sol alumbrarlo todo con un fondo color azul sin límites, veías las sombras de los árboles irse recorriendo con el pasar de las horas y hasta escuchabas a los pájaros cantar. Era la clase de paisajes que Castiel quería guardar para siempre antes de que la huella humana dejara su marca.

Sólo había un pequeño defecto en ese bonito paisaje de inmensos pastizales y cielos despejados y era el abochornante calor y los mosquitos...bueno, eran más de uno. Los tres conducían con las ventanillas abajo debido a que el aire acondicionado del auto se había descompuesto y Charlie no había podido arreglarlo, eso ocasionaba que el aroma a ganado se colara por la ventanilla y algunos insectos decidieran molestarlos haciendo que Mish y Loki se pusieran de malas en el asiento trasero junto a Castiel.

Hacía como dos kilómetros que habían pasado el letrero que les daba la bienvenida al Rancho French Mistake y se preguntaban cuándo llegarían al famoso lugar donde trabajaba su mejor amigo y su futura esposa, no había señal de vacas por ningún lado, o al menos eso fue al principio pero los aromas se comenzaban a hacer más fuertes conforme el auto avanzaba.

—Huele a Tim—gruñó Gabriel—Perdón, huele a mierda—Charlie se soltó riendo mientras Castiel negaba, divertido—Oh joder, muero asfixiado o derretido. No puedo con este aroma.

—Es señal de que nos vamos acercando—aclaró Charlie sonriendo mientras apartaba las manos del volante para hacerse una coleta en lo alto de la cabeza—Más le vale a Balthazar hacer la recepción en un lugar realmente fresco, ¡me estoy derritiendo!

—Ha estado peor en Texas—murmuró Castiel mientras se arremangaba la camisa y se desabrochaba los primeros botones—Creo que aquí se siente asfixiante—Mish subió a su regazo y Castiel comenzó a echarle aire con las manos—No nos estaríamos muriendo si arreglaras el aire acondicionado, Charlie.

—Si me derrito como un sensual caramelo será tu culpa—gruñó Gabe señalándola con la envoltura de sus dulces—Oh joder, ¿cómo es que huele a mierda si no veo ninguna puta vaca?

Castiel se soltó riendo mientras abanicaba a Loki y a Mish que estaban realmente abochornados con el calor. Sus gatos eran especiales porque debían ser tratados como dioses, en especial Loki, así que ya se estaba estresando de aquel asfixiante calor mientras miraba fijamente por la ventana y movía la cola de un lado a otro, intentando atrapar algunos insectos.

Siempre Serás Tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora