Jungla de Espejos (Albalia)

REALIDAD

No estoy disfrutando esta semana. No es culpa de Marta. En realidad no es culpa de nadie más que mía. Por suerte los ensayos generales en plató me gustan porque dejo de sentir la presión de estar siendo grabada las veinticuatro horas del día. Es cierto que se te olvida que hay cámaras pero para algunas cosas siempre están presentes. Me gusta poder estar un poco más relajada a pesar de que nos pasamos aquí horas y, a veces, volvemos a la academia tardísimo. Noelia y Famous ensayan mientras los demás esperamos nuestro turno sentados y charlando. El plató se convierte en un artístico caos donde se mezclan trabajadores de producción, de sonido, de iluminación, bailarines... es curioso ver todo lo que se mueve detrás de un programa así. Observo a Natalia hablar con Damion, ambos tenían el presentimiento de que les iba a tocar juntos y así fue. Suspiro y giro la cabeza antes de que mi mirada se cruce con la suya. Me pongo nerviosa. Dave ya me mira de reojo y yo le hago un gesto que indica que disimular no se le da demasiado bien lo cual hace que vuelva su vista al ensayo de Noelia y Famous. Marta tiene un tic en la pierna. Está sentada a mi lado y me roza todo el tiempo.

-Marta, para- digo sonriendo a la vez que pongo mi mano en su rodilla.

-Perdona tía, es que me pongo nerviosísima- dice consciente de que parece que le va a dar algo- Y mañana será peor.

-Todo irá bien- digo dándole unos golpecitos con la mano en la rodilla. Una chica muy guapa de producción se acerca para preguntarnos si estamos bien. Si necesitamos algo. Dave aprovecha para pedirle un poco de agua porque tiene la garganta seca y Miki se levanta para ir al baño. Noelia y Famous terminan su ensayo y Natalia y Damion se incorporan. Es su turno. Les sonrío a ambos. Han trabajado mucho esta semana y estoy segura de que será una de las actuaciones de la noche. Marta se levanta porque también necesita ir al baño justo cuando vuelve Miki ocupando el sitio que ha dejado ella.

-¿Estás bien?- pregunta.

-Claro- digo intentando sonreír.

-¿Seguro?- dice frunciendo el ceño. Me limito a asentir- Pues que sepas que no lo parece.

-Estoy bien- digo intentando convencerme a mí misma de algo que no es verdad. Natalia y Damion comienzan a cantar sobre el escenario.

-Lo llevan bien, ¿Verdad?- pregunta Miki observándoles orgulloso.

-Sí- digo mirando a mi alrededor- Ven- le agarro del brazo haciendo que nos sentemos un poco más alejados del resto. Marta y Dave ya han vuelto del baño.

-¿Qué pasa?- pregunta preocupado. Necesito soltarlo. Necesito contárselo a alguien que sea de mi plena confianza. No tengo a mi hermana conmigo, ni a mis padres, ni a mis amigas. No tengo a nadie de los que acudo habitualmente. Solo puedo contar con las personas que tengo aquí dentro. Miki es uno de los pocos a los que ya puedo considerar amigo.

-No estoy bien- susurro con lágrimas en los ojos.

-¿Quieres que avise a alguien? ¿Estás enferma?- pregunta con los ojos muy abiertos.

-No, no estoy enferma. Y si lo estoy es de la cabeza- digo con un hilo de voz.

-¿Me puedes decir qué pasa? Lo digo porque me estoy empezando a acojonar- dice Miki muy serio. Me tomo unos segundos para responder porque no sé cómo hacerlo. El lío de mi cabeza es bastante importante llegados a este punto.

-Me gusta Natalia- digo mirándole fijamente. Él empieza a reír.

-¿Eso era? A mí también me gusta Natalia- dice encogiéndose de hombros aún riendo.

-Te aseguro que no te gusta de la misma forma que a mí- digo muy deprisa. La sonrisa se le borra de la cara. Mira a Natalia sobre el escenario y me mira a mí. Vuelve a mirarla para, acto seguido, volver a clavar sus ojos en mí.