Iba en la parte trasera del coche de policía. La sirena sonando y un par de policías sentados en el asiento delantero.
Probablemente lo que me espera ahora es un par de días en la celda de una comisaría hasta que hagan todo el tramite de llevarme a prisión preventiva hasta mi juicio.
Esto quiero traducirlo a tengo dos días para escapar de una comisaría hasta que me trasladen a una prisión dónde escapar seguramente sea mucho más complicado.
El trámite para mi traslado será difícil de conseguir, porque necesitan hacer toda una ficha y un informe, para eso necesitan mi identidad, es decir, mi nombre verdadero; cosa que no tienen y no van a poder conseguir. Para poder juzgarme necesitarían identificarme. Menos mal que ser La Carterista y que casi nadie sepa mi nombre verdadero va a darme unos días más para poder escapar.
De verdad que jamás pensé que podría caer en una trampa y de esta manera... Es verdad que a los estafadores nos enseñan a como intentar escapar ante este tipo de casos, pero lo mío es diferente, yo no soy un criminal de cualquier tipo, yo soy La Carterista y seguramente quieran hacer mi traslado a prisión lo más rapido posible porque una comisaría carece de las medidas de seguridad suficiente para confinar a alguien como yo.
Estoy enfadada con todo el mundo, estoy enfadada porque me siento tonta. Estoy furiosa con ese saboteador...
Lo que más nerviosa me pone es no saber nada del exterior. Me imagino un momento de caos en la triada y en los estafadores. Me imagino a Mustang liándola de forma muy grande y me imagino al saboteador atacando de nuevo a la organización ahora que con mi situación desconcertante estarán todos con la guarda baja desubicados.
–Te veo muy tranquila.–dijo uno de los policías.
Yo miré por la ventana y suspiré ignorando el comentario. Tengo que pensar deprisa porque necesito salir de ésta rápido. Y sobretodo tengo que ayudar a que el resto de mis compañeros no caigan. Cada minuto que pasa veo la caída de la organización.
Al ver mi silencio uno de los policías encendió la radio.
–Noticia de última hora, la mayor criminal que ha tenido este país ha sido arrestada esta mañana. La Carterista, estafadora profesional, ha puesto a prueba a los servicios de policía durante muchos años. Hoy por fin ha sido arrestada en una de las estaciones de metro de la capital tras protagonizar una escandalosa persecución por la plaza. Fuentes nos confirman que esta detención podría marcar un antes y un después en la vida del crimen organizado. Expertos nos hablan de la Carterista como una persona muy inteligente y manipuladora, con una larga lista de estafas a su espalda que la hacian ser considerada uno de los objetivos más inminentes de la Interpol. Los servicios de seguridad nos aseguran que con ella caerán el resto de integrantes de la organización de la que formaba parte, Los Estafadores, cuyo jefe ha conseguido pasar desapercibido de las autoridades durante más de una década de actividad criminal. –decían através de la radio.
Un policía bajó el volumen y el otro conducía.
–¿Has oído eso? Estás en las noticias–dijo el policía, lo decía de una forma para hacerme ver que era mi fin.
–No sé por qué os alegráis tanto... A mí me daría vergüenza escuchar que los cuerpos de seguridad no habéis sido capaces de desmantelar a una organización criminal durante más de una década.–dije y volví a mirar por la ventana.
Esto es lo que quería el saboteador. Quería ponernos en un punto de jaque. La policía cree que con mi detención el resto de la organización caerá y lo mismo creerá el saboteador. No sé qué tendrá pensado Mustang pero ahora todo depende de él.

ESTÁS LEYENDO
La Carterista
AkčníOs diría mi nombre pero he tenido tantos que no me vais a reconocer por ninguno de ellos; mi gente me conoce como la Carterista. Me gané ese nombre a los 13 años cuando le robé la cartera a uno de los hombres más peligrosos del mundo, que además...