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Advertencia: en este capitulo hay escena de sexo. Si eres menor de 18 quedas advertida(o) y de preferencia pasa de este capítulo

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Nada más llegar a la casa de Xim y tras saludar a su mamá subí corriendo las escaleras y entré sin golpear a su habitación, algo tan típico en nosotras.

Casi me desmayé de la impresión al ver a Xim en el suelo extendida al lado de su cama quieta y con los ojos cerrados. Corri como condenada y me tire al suelo junto a ella.

- Xim... ¡Xim! ¿Que te pasa? - le tironié el brazo.

Abrio el ojo y se largo a reir al ver mi cara de infarto - Calmate Jazmin estaba meditando.

-¿Meditando tirada en el piso? - la miré con odio - ¡Te detesto! Me diste un susto horrible, pense que te había pasado algo malo - le pellizqué el brazo.

Me miró fijamente con sus ojos azules como si quisiera analizarme.

- ¿Tanto te preocupé? Lo siento, siempre medito así - apoyó su mano en mi rostro y me hizo cariño mientras me miraba triste . Quede asombrada ya que ella nunca era cariñosa con ninguna de nosotras.

Pero en lugar de que se me pudiera quitar el asombro este aumentó cuando me rodeó con sus brazos para abrazarme.

- Lo siento mucho Jaz no te quise preocupar así - aún me tenía abrazada y ya me estaba empezando a incomodar porque aún estábamos las 2 tiradas en el piso y cuando me abrazó quedó casi encima mío.

- Bueno, bueno no pasa nada. Estas bien que es lo importante - sutilmente me moví un poco.

- Lo siento creo que te estoy aplastando. Fue sin querer - se alejó un poco de mí y se puso un poco roja.

Me incorporé para sentarme y hizo lo mismo.

- ¿Bueno y quieres platicar? ¿O que veamos una peli? O tarde de chicas con masajes faciales y todo eso - reí.

- Platicar esta bien. ¿Sabes? Hay una idea que no me deja de dar vueltas en la cabeza... ¿tú crees que yo soy fea? Pienso que tal vez por eso Alejandra me dejó.

Aprete los puños involuntariamente. Me daba rabia ver como esa perra había destruido la autoestima de mi amiga.

- Xim claro que no eres fea. Eres muy linda amiga. .. Siempre lo has sido y siempre lo serás.

- Entonces no entiendo por que....

- Mira Xim - la interrumpí apoyando mi mano en su brazo - Ay veces en que no vamos a entender las cosas. .. Pero todo pasa por algo y es así amiga. Alejandra debe estar con una perra cmo ella y tu con una princesa como tú.

Me intentó sonreir pero podía ver su dolor interno. Estuvimos conversando durante horas y en cierta manera abrió su corazón hablando de todo aquello que le dolía o afectaba. Yo la escuchaba atenta y le decía palabras de consuelo llenas de cariño.

Para cuando acabamos de hablar Xim estaba con una sonrisa diferente que no se la veía hace tiempo. Quizás por fin comenzaba a aceptar la ruptura con la innombrable.

Tras cenar juntas me fui a casa y sin Muchas ganas me cambié para esperar a Miguel. No se me antojaba arreglarme ni nada, no me interesaba impresionarlo en lo absoluto.

Puntual llego por mí en su auto y nos fuimos a un bar. No pretendía emborracharme pero si bebería algo, despues de todo merecía desestresarme.

- Te ves preciosa - me dijo Miguel como por 20va vez en los que llevábamos de la noche.

60 días con ellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora