Dedicado a VeronicaVelaar
*Narra Javiera*
Me quedé unos segundos inmóvil frente a la casa de Xim, di una mirada de reojo a Renata quien con un gesto me alentó en silencio. Tomando aire presioné el timbre hasta el fondo y esperamos en el silencio sepulcral unos cuantos segundos. Estaba por presionar el timbre con el dedo nuevamente cuando sentí unos lentos pasos que parecían estar anclados al piso y ser arrastrados lentamente hasta acercarse cada vez más, luego un silencio absoluto y por fin la puerta se abrió para exponer a una demacrada Xim, casi tan pálida y ojerosa como Jazmín, incluso apostaría que también había perdido peso.
Su mirada se expandió fugazmente al vernos y de la misma forma fugaz miró por sobre nuestros hombros con un rayo de esperanza en su mirada, quizás en busca de Jazmín.
Pero al no encontrarla su mirada se apagó lentamente y retornó a la sombra que la embargaba hace unos segundos al abrir.
— Hola chicas pasen — señaló por todo saludo y se apegó a la pared para dejarnos pasar
Juraría que la escuché emitir un gran suspiro al momento de cerrar la puerta tras nuestro. En silencio nos dirigimos a la sala de estar, dejándonos caer las 3 a la vez en uno de esos mullidos sillones.
— ¿Cómo estas Xim? — Rena rompió el silencio que inundaba la habitación
— Yo... pues... mejor, dentro de lo que se puede. ¿Y ustedes? — pasó una mano por su larga cabellera negra
— Bueno aquí estamos, afligidas por todo lo sucedido... si bien nos reunimos hace unos días las 3, aún estamos muy afectadas por todo... Reitero nuestras disculpas amiga — escudriñé sus ojos intentando adivinar lo que estaba pensando en aquel instante, pero su misteriosa mirada no me entregó respuestas.
— Ya les dije que las perdoné chicas, entiendo que todo surgió producto de la desesperación, no estaba en mi mejor momento y como les decía, no sé si estaría con vida de no haber sucedido lo que sucedió — bajó la mirada preocupada, titubeante — Cómo está... ¿Cómo está Jazmín?
Tanto Rena como yo dimos un respiro de alivio
— Que bueno que lo preguntas — suspiró Rena dándome una mirada rápida.
— Sí, ella no está muy bien a decir verdad, está muy triste por todo lo sucedido y... está sufriendo también esta separación, ¡no entiendo porque no están juntas si se aman por la mierda! — exploté repentinamente causando que Xim abriera los ojos para luego bajar el rostro con evidente tristeza.
— Pregúntale a ella... pareciera que la tierra se la tragó, desde que se supo todo que no la he vuelto a ver — Xim tomó aire lentamente, pestañeando para contener las lágrimas que estaban por salir de sus ojos, sin conseguirlo.
— De hecho hace 2 días estuve con ella y... está muy desanimada y triste, más aún cuando supo de ti y Alejandra... ¿Estás segura que quieres estar con esa zorra? — pregunté mirando fijamente a sus ojos
Xim pestañeó con mayor efusión y con un rápido movimiento de manos quitó las lágrimas que recorrían su rostro. Su ceño fruncido no se hizo esperar.
— ¿Alejandra? Yo no estoy con Alejandra... — sacudió la cabeza incrédula — ¿Porqué estaría con esa perra?
Fue nuestro turno de fruncir el ceño. Enarqué una ceja mientras asimilaba sus palabras.
— Pero Jazmín piensa que... ¡ella te vio con Alejandra! Las vio besarse afuera de tu casa hace varios días, venía a pedirte una oportunidad pero quedó impactada al verlas... dijo que después ustedes entraron a la casa y cuando ella iba a irse apareció Miguel, quien le dijo que no siguiera insistiendo, que tú y Alejandra eran novias ahora y que merecías ser feliz — repetí como grabadora todo lo que me había contado Jazmín
— Pero... — Xim se llevó las manos a la boca — Entonces no era que ella se hubiese olvidado de mí... Entonces era que...
— ¡Ella ha pensado todos estos días que tú estabas con Alejandra! — la interrumpió Renata
— ¡Maldición! Y yo pensando que ya me había superado y no quería saber de mí... — Xim bajó la mirada abatida para luego volver a subirla con un rayo de esperanza resplandeciente
— ¡Estas loca! Ella ha hecho de ermitaña desde ese día que las vio, no ha salido de su habitación, no come, no duerme, es una zombie viviente — rodé los ojos — Bueno quizás exagero un poco pero la cosa es que si ha estado con que no quiere nada y muy triste... pensando que te había perdido.
— Ay no... pobrecita — Xim se llevó las manos a sus mejillas, angustiada — No me puedo imaginar cuanto debe haber sufrido... entonces ella aún me ama, ¡ella me ama! — exclamó levantándose de un salto y dejándonos con un mini infarto ante su repentina efusión.
Se dirigió veloz a tomar su bolsa, volvió por su móvil que estaba en el asiento del sofá y voló rauda a la entrada, cogiendo las llaves del carro que colgaban de la puerta. Abrió y ya estaba por salir cuando se dio una media vuelta
— ¿¡Y que hacen ahí todavía par de mironas!? ¿Que no vienen? - exclamó con una sonrisa en su rostro
Nos miramos rápido con Renata y tan veloces como Xim la alcanzamos en la puerta
— ¿Pero a dónde vamos? — inquirió Renata mientras corría a duras penas intentando seguir las zancadas de Xim, quien ya se perdía en el interior de su carro.
— Vamos a recuperar al amor de mi vida — nos dedicó una hermosa sonrisa, que me hizo querer dar un salto de alegría.
Pero no había tiempo de emocionarnos ni celebrar
— ¡Las espero en casa de Jaz! — exclamó por la ventana antes de poner en marcha el carro y partir
Por nuestra parte nos metimos en mi carro y con una sonrisa de oreja a oreja nos dispusimos a seguir a Xim, que ya se perdía en la curva del fondo de la calle.
— ¡¡Jazmena regresa!! — exclamó Renata toda despeinada y con una melena de león a causa del viento que ingresaba con furia por la ventanilla
— ¡Jazmena regresa, siiiiiiiii!— exclamé a todo pulmón dando unas carcajadas, disfrutando de aquellas palabras, que eran las más importantes en aquel momento.
Aunque todavía no volvían formalmente, si había algo innegable era el inmenso amor que tenían la una por la otra y eso era todo lo que ambas necesitaban para poder continuar con su historia.
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N/A
Hola mis amores, con mucha alegría les traigo la actualización de esta novela... Por fin un rayo de esperanza luego de toda la tormenta
¿Cuéntenme que les parece?¿Jazmena regresa o no regresa? ¿Qué piensan? 😊
Este capítulo está dedicado a una lectora muy bella que capítulo a capítulo me entrega su cariño y apoyo en forma de estrellas, ¡gracias por leerme siempre linda! Lo aprecio muchísimo VeronicaVelaar
Como siempre y si les gusta no olviden dejarme su amor 💕
Besos y abrazos, Fer ❤️
ESTÁS LEYENDO
60 días con ella
RomanceJazmín sufre día y noche por ver en el estado de depresión crítico en el que se encuentra una de sus mejores amigas. Tras la ruptura con Alejandra, Ximena llora día y noche sintiendo que la vida continúa pero que no logra seguirle el ritmo... no sin...