Catch Me If You Can

8. Descubrimiento

Durante los días siguientes, Yukhei continuaba despertando a la misma hora, yendo a la misma escuela, y asistiendo a las mismas aburridas clases.

Todo parecía estar igual de monótono pero, Yukhei ya no lo sentía así.

Desde su encuentro con Jungwoo, de algún modo, todo parecía haber cobrado un tono distinto: los olores eran más intensos, los colores se veían más brillantes, todo estaba un poco mejor. Ya ni siquiera le importaba tener que asistir diario a esa escuela tan ridícula, sólo le importaba afrontar su día lo más rápido que pudiera, para poder regresar a casa lo antes que se pudiera, y así, ver a Jungwoo otra vez.

Porque luego de la primer visita, Jungwoo se encargó de visitarlo frecuentemente.

Al principio, Jungwoo tenía que esperar a que Yukhei regresara de clase para poder entrar a su casa, pero los hábitos se arraigan, así que Jungwoo no tardó demasiado en descubrir las debilidades de cada entrada de la casa Wong.
Había días en los que Jungwoo ya esperaba a Yukhei en su habitación.

Aunque realmente no se juntaban para hacer gran cosa, Yukhei y Jungwoo disfrutaban mucho la compañía el uno del otro. Les gustaba contarse su día, ver películas, o simplemente estar echados haciendo nada.

Yukhei ni siquiera se sorprendió de ver a Jungwoo acostado en su cama leyendo una revista cuando regresó de la escuela.

-¿No deberías estar haciendo tarea? -Yukhei contradijo su pregunta arrojando su mochila lejos y colocándose al lado de Jungwoo de inmediato.

-Estoy haciendo algo mucho más interesante, Yukhei -el castaño no apartó su vista ni un segundo de la revista.

-¿Qué es más interesante que eso? -el moreno no se dio cuenta en que momento ya estaba completamente perdido en Jungwoo.

-Un test -Jungwoo fruncía el ceño más conforme más se concentraba.

Yukhei decidió no molestarlo más, y en su lugar prefirió acurrucarse cerca de Jungwoo e intentar dormir, pero antes de caer en los brazos de Morfeo, Jungwoo se levantó de la cama, provocando que Yukhei perdiera el equilibrio y cayera de la cama.

-¡No lo puedo creer! -la revista que Jungwoo estaba leyendo salió volando -¡esto es basura!

-¿Qué sucede? -Yukhei preguntó soñoliento y adolorido.

-¡Esa estúpida revista dice que no somos compatibles!

Yukhei sintió algo extraño que nunca había sentido antes. Nunca creyó que una frase como aquella iba a hacerlo sentir la persona más feliz del mundo. Ahora más que nunca, quería abrazar a Jungwoo y nunca dejarlo ir.

-Bueno, como sea -Jungwoo pisoteo la revista un par de veces luego de colgarse la mochila al hombro -debo de irme.

-¿Qué?, pero acabo de llegar -Yukhei dijo con un puchero.

-Mi hermano va a llegar a casa temprano, sólo vine a saludar -Jungwoo caminó a la puerta.

-Oye... -Yukhei alcanzó a Jungwoo -¿te puedo acompañar?

El corazón del castaño se aceleró, y seguramente su rostro se estaba incendiando, de eso no había duda. Se sintió alegre, nunca antes alguien le había pedido tal cosa como esa.

-Gracias -Jungwoo dijo con una autentica sonrisa de agradecimiento -pero preferiría que no.

Jungwoo y su afán por arruinar los momentos más importantes y románticos, pero, ¿qué más podía hacer?. Dongyoung le dijo claramente que le prohibía cualquier tipo de contacto, y si los veía llegando juntos a casa seguro le pegaba un tiro a Yukhei.