Catch Me If You Can

18. Verdad

Al otro día de haber faltado al partido, Jungwoo se levantó de mejor humor, un muy buen humor de hecho.

Después de darle muchas vueltas al asunto, decidió que no dejaría que Wong Zhen se metiera en sus asuntos otra vez. Aunque no la culpaba del todo, él era quien tenía que crear sus oportunidades, y nadie mas que él era responsable de su propia felicidad.

Tal vez ya no podía hacer nada por el partido, ni por el equipo, y era muy probable que lo penalizaran prohibiéndole asistir a un partido o algo así, pero podía ir poco a poco con las cosas con las que realmente quería estar bien. Y obviamente, lo primero en su lista era Yukhei.

La noche anterior ni siquiera quiso hablar con él, y quizás ahora Yukhei estaría algo molesto. No lo culpaba para nada, y por esa misma razón sabía que tenía que hacerle saber que todo estaba bien, pero ¿cómo?

Jungwoo llevaba pensando en eso toda la mañana antes de ir a la escuela. Debía de haber una manera en la que pudiera comunicarse con su novio, sin que comprometieran su relación, claro. Pero por más que lo pensó, sólo encontró una solución.

Él conocía el número de Yukhei a la perfección. Además, sabía que no corría riesgo al llamarle, ya que Yukhei siempre había sido precavido para llamarle desde su número de celular.

Con el corazón latiéndole al mil por hora, Jungwoo marcó el número. Ni siquiera había terminado de escucharse el primer sonido de espera y Yukhei ya había contestado.

-¿Jungwoo? -el castaño mentiría si dijera que Yukhei no se escuchaba mal, el moreno se escuchaba muy triste, incluso cansado.

El castaño ya tenía una idea de lo que le diría a Yukhei, lo había practicado un par de veces. Pero al escuchar su voz olvidó todo lo que quería decirle.

Olvidó que quería disculparse con él y explicarle todo lo ocurrido. Era increíble como Yukhei tenía la capacidad de enamorarlo nuevamente con una sola palabra.

-¿Jungwoo?, ¿estás ahí? -el moreno repitió al sólo escuchar silencio al otro lado de la línea.

-Yukhei... -Jungwoo perdió el aliento y su mente se puso en blanco -te quiero.

Tan rápido como Jungwoo pronunció esas palabras, colgó. Ni en sus sueños más alocados le habría dicho a Yukhei tan explícitamente lo que sentía. Sí, eran novios, pero nunca antes se habían dicho algo como eso. Al menos el castaño quería esperar un poco más porque ¿qué tal si Yukhei no sentía lo mismo que él sentía?

Jungwoo no se atrevió a llamarlo nuevamente, decidió que lo mejor sería hablar con Yukhei más tarde.

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Yukhei no tenía ni la menor idea de lo que estaba pasando, pero le encantaba.

Nunca antes alguien le había llamado, alguien que no fuesen su madre o abuela, ni mucho menos tan temprano para decirle lo que tanto había estado esperando.

Jungwoo, su Jungwoo, lo quería.

De verdad le sorprendía lo mucho que Jungwoo le gustaba cada día más. Era increíble que existiera alguien tan lindo y hermoso como él.

El moreno estaba derritiéndose de amor, no podía permanecer más tiempo sin decirle que también lo quería, tenía tanto tiempo planeando decírselo, que le alegraba al fin poder hacerlo.

Justo cuando estaba a punto de llamarle a su novio de vuelta, sucedió otra cosa que tampoco creyó que pasaría pronto: -¡YUKHEI! -su madre gritó desde escaleras abajo -¡QUIERO QUE VENGAS, AHORA!