24.- Feliz Navidad

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- Hermione! Hermione despierta!- Draco le estaba gritando por que la chica no despertaba, eran las 11 de la mañana y se acostaron a las 7, solo habían dormido 4 horas. El chico la levantó en brazos y bajó con ella a cuestas riendo hasta dejarla en el sofá. 
- Que quieres Draco?..- bostezo- solo son las 11! – se tumbó en el sofá e hizo un puchero.- necesito dormirrr! 
- Venga! Vamos a abrir los regalos! – él emocionado llevó todos los paquetes al sofá. – toma, éste es mi regalo. – Hermione le sonrió y ya resignada abrió el regalo, era una cajita muy pequeña y sacó un anillo de oro, se lo puso y notó que le quemaba y se lo sacó corriendo. 
- Que es esto Draco? Quema! 
- Es un anillo, lee la inscripción -ponía:“feliz navidad”.
- Y por que me ha quemado?- preguntó. 
- Cada vez que cambie el mensaje con mi mente te quemará para que te des cuenta. 
- Está bien… 
- Solo bien??.. tu sabes en lo que me basé para hacer el anillo y lo que me costó?.
- Si, en la marca tenebrosa, y si.. unos 3 días.. 
- 4.. como lo sabes?
- Yo hice unas monedas para el ED y quemaban cuando yo daba una fecha y una hora… - el chico la miró sorprendida.
- Ya me acuerdo… que os pillamos.. jajaja, menudas caras se os quedaron… - ella le dio un golpe.
- Por vuestra culpa nos pillaron! Sois.. rastreros! 
- Era… ya no lo soy.. pero bueno.. te gusta?..
- Si! Me encanta. – le dio un beso en la mejilla y ella sacó una cajita para él. – toma… - el chico sonrió y abrió su paquete, en él había una pulsera de plata que también cambiaba de mensajes. 
- Que original..- los dos empezaron a reír. – que más te han regalado?.. 
- Pues, harry un libro, Ron una pluma nueva, Ginny me regaló una camiseta, la señora Wesley unos guantes, Luna unas zapatillas y Zabini… mejor no quieras verlo.. 
- Como que no?.. enséñamelo! – Hermione se puso colorada y sacó una caja en la que había un conjunto de ropa interior. 
- No cambiará.- dijo él. 
- No está mal.. pero no creo que me ponga esto nunca.. demasiado.. transparente. 
- Pues yo creo que te quedaría muy bien. – ella levantó una ceja y se puso colorada. - Algo más?... Kevin no te a regalado nada?..
- Si.. la cadena- Hermione se la enseñó y él le sonrió. – a ti que te han ragalado?
- Blaise me ha regalado un botecito de sangre de unicornio y un libro, sabe que me encantan y… que te pasa?.. – preguntó al ver la cara de Hermione.
- Sangre de unicornio?... 
- Si, bueno, se la pedí por que su tío suele conseguir y me mantiene con fuerza… si no esta mañana no te hubiese podido coger en brazos,y anoche no hubiese podido.. bueno.. eso, Pansy me ha ragalado una caja de bombones gigante- le enseñó la caja, jamás había visto una tan grande. – y bueno, Potter y Wesley me han ragalado una corbata de color roja y dorada.. – la chica rió- sabían que necesitaba una.. pero rojo y dorado me parece un poco… griffindoriano… y Ginny me ha regalado un diario… - el chico bajó la cabeza. 
- No está mal no?.. 
- Si, nunca había tenido tantos regalos, dale las gracias a tus amigos. 
- No, se las das tu!
- Jamás! Nunca les daría las gracias por esto!
- Eres un inmaduro, me voy a dormir.. a no se que caiga un meteorito no me llames. – la chica se levantó y se dirigió a la habitación del chico donde momentos antes estaba durmiendo, aún quedaba su olor. 
- Que haces en mi cuarto? – preguntó el chico.
- Dormir??? Bueno, intentar dormir.. 
- Y por que no te vas al tuyo?.. 
- Simplemente me apetece dormir aquí.- el chico le sonrió y se metió en la cama abrazándola. 

En otra habitación bastante lejos de la de premios anuales un chico se levantaba y veía sus regalos, de sus padres, tíos, abuelos, y el de ella. Abrió el regalo y era un libro, era ese libro que él no podía conseguir por estar en Hogwarts, dentro del libro había una nota de Hermione. 

“ se que no es caro, ni es una joya, pero creo que era lo que más te hacía ilusión, además está firmado por la autora, la conozco, es muggle, aun que su marido es mago, de ahí que escriba de las dos formas. Bueno, solo desearte feliz navidad, espero que te guste y te quiero.”

No abrió ningún paquete más, los dejó todos cerrados y se puso a leer el libro que le había regalado.

Pasaron los días, pronto sería año nuevo y los pocos que se quedaban de 7º y 6º curso en el colegio organizaron una cena y un baile, los Wesley por mandato de Molly se fueron a la madriguera y Luna con ellos, Pansy fue con su abuela, ahora tutora de la chica, llevaba todas las navidades sola, ni Draco ni Blaise le hacían caso desde que pasó lo de Hermione, ella ya había apañado cuentas con Caroline y solo le hablarían si pedía perdón a Hermione, cosa que aún no había hecho. Kevin también se fue hasta el día 7, así que no podría ver a Hermione en una semana para hablar con ella, la chica le estuvo esquivando todo lo posible esos días, no quería hablar con él de momento. 

Así pues los 3 chicos y Hermione se quedaron en el castillo. Por la tarde Hermione se metió en la bañera para relajarse, se puso música y del agua salía un aroma a melocotón que la relajaba mucho, Draco se había ido al baño de los prefectos con Harry y Blaise, ella había preferido algo más relajante, al salir se puso su crema hidratante y se puso un batín de seda rosa, así se sentó en el sofá de la sala de premios anuales junto a la chimenea, se hizo una coleta alta con una crema alisadora en el pelo que hacía efecto en 3 horas y se puso a leer. 

Los chicos estubieron en el baño de los prefectos, Blaise y Draco habían tirado vestido a Harry, y luego le declararon la guerra al niño que vivió, el cual perdió la batalla.

- Sois dos contra uno!- dijo él.
- Se siente Potter…- Blaise rió mientras se sentaba en uno de los escalones que había en esa minipiscina, Draco se sentó en otro a su lado y enfrente de los dos Harry. 
- Malfoy, te has hecho un corte en la espalda… - Blaise le miró la espalda y sí, era cierto. 
- No te preocupes luego me lo curará Hermione. – los dos le miraron pícaramente. Harry ya había cambiado de opinión con respecto a Malfoy, ya en varias ocasiones le había demostrado su lealtad y aun que se llamasen por el apellido había nacido una especie de amistad entre ellos, Ron se llevaba bien con él, simplemente por que no se enteró de nada de lo que pasó con Hermione. 
- Que tal con Hermione?.. – preguntó Blaise- ahora no tiene novio.. – Harry y Blaise se miraron cómplices. 
- La otra noche durmimos juntos…- los dos rieron.- he dicho dormir!!
- Si claro, tengo yo a Granger en camisón, en mi cama, junto a mí… y estás que solo duermo… - los tres rieron. 
- Por cierto.. por que le regalaste eso a Hermione?... se quedó cortada. 
- Te gustó?.. – preguntó Blaise.
- A mi sí, pero a ella.. no se, le dejó un poco aturdida.
- Que le regalaste Blaise?.. – preguntó Harry, Hermione no le había contado nada de ese regalo.
- Un conjunto de ropa interior… 
- Si, pero prácticamente transparente.
- El caso es que te guste a ti… lo disfrutarás tú. – Draco le miró con el ceño fruncido.
- No se a que viene eso… - dijo el chico.
- Pues, es año nuevo, ella no tiene pareja, tú tampoco… - Harry le tiró agua a Blaise.
- Eres retorcido… 
- Y tu que Potter?.. que arás esta noche sin Wesley?.. por que supongo que.. – Harry se puso colorado.
- Pues nada.. las uvas y bailaré un rato con mi amiga y a dormir… - Blaise rió.
- No te aburras… yo ya he quedado, con una chica de Hufelpuff, está tremenda.. creo que me va a tener que dejar Hermione su regalo para esta noche, aun que es perfecto para ella. 
- Por que?..- preguntó Draco, él no sabía mucho sobre eso, nunca se había fijado en esas cosas. 
- Es blanco, pureza.. Hermione es una santa, es perfecta, transparecia, como ella, todos los sentimientos los saca, siempre llora por que se alegra, se enfada o está triste, y no le compré un tanga de conjunto por que sé que es tímida.. no se, más o menos por eso. – Draco y Harry se quedaron mirando a Blaise con una ceja levantada.
- Das miedo Blaise, nunca me hubiese atrevido a regalarle algo así a Hermione, seguramente le hubiese comprado algo con ositos… - dijo Harry.
- Eso es por que la subestimas, ella tiene mucha fuerza y aun que de la cara de niña buena… yo creo que es una leona… y paremos de hablar de este tema porfavor.. – todos rieron. Al final salieron del agua y se secaron, y los tres fueron a la torre de los premios anuales para juntarse con Hermione. 
-
Al llegar la vieron tumbada en el sofá en una pose sexy, se le veía una pierna prácticamente entera, su piel brillante y suave se reflejaba con la luz, sus manos sedosas pasaban las páginas del libro, llevaba la coleta que le hacía ver inocente y los tres se quedaron sin aliento. 

- Hola chicos!- se sentó sin darse cuenta de las miradas de sus compañeros.
- Voilá!.. que os decía?... – Harry y Draco asintieron. Los tres se sentaron en el sofá con ella.
- Hermione, me ha salido un corte en la espalda.. me lo curas?.. – preguntó tímidamente. 
- Otro?.. – Draco le hizo señas de que estaba Harry delante. – y que has hecho ahora? Hace unos días te caíste ahora que?... 
- Supongo que al tirar a Potter a la bañera vestido me arañó o algo.. 
- Le habéis tirado vestido al agua?... Slytherins!- dijo ella. – venga, vamos a tu cuarto y te lo curo. - Blaise le guiñó un ojo y Harry sonrió.

Entraron en el cuarto y Draco se tumbó en la cama mientras Hermione le ponía la poción en la espalda y sacaba su varita. 

- Tengo otro corte.. pero, prefiero que me lo cure Blaise… 
- Donde te ha salido?.. – él bajó su cabeza apuntando a su miembro. 
- Ah.. bueno.. llamo a Blaise y que te lo cure él.. 
- Ahora está Potter… luego si eso. 
- Si quieres… bueno.. yo.. – ella se puso colorada, él puso una sonrisa cínica.
- Si quieres verla no hace falta que pongas excusas.. me lo dices y ya está. 
- Eres un idiota Draco! No quiero verla! 
- Si, claro.. te mueres por verla lo mismo que todas.. – él rió. 
- Pues no es para tanto.. – el chico levantó una ceja.- las he visto más grandes.. – Hermione le miró por encima del hombro y salió de la habitación y aun que era mentira, él se quedó con la boca cerrada. 

Estuvieron los 4 juntos hasta que fue la hora de arreglarse, Hermione se metió en su habitación, se puso una falda negra hasta el suelo y un palabra de honor elástico rojo, se pintó los labios de color rojo y sus ojos los delineó con una raya negra. Se dejó el pelo liso y lo oscureció un poco quedándose un color marrón chocolate. Bajó las escaleras y bajo estaba Draco con su traje negro una camisa roja y la corbata que le habían regalado Harry y Ron. Le sonrió y salieron de la torre, al llegar a la cena se sentaron en una mesa redonda, ya que quedaban unos 20 alumnos y los profesores. 

Al acabar la cena la mesa desapareció y los profesores se fueron, allí se quedaron los alumnos con todo el gran comedor para ellos. Hermione estuvo bailando con Harry casi toda la noche, de vez en cuando Blaise le cambiaba la pareja a Harry, Draco se mantenía al margen, él solo bebía. Llegaron las 12, los chicos cogieron sus uvas y los cuatro juntos se las tomaron al acabar se besaron todos, Hermione miró a Draco antes de besarle y le dio un dulce beso muy cerca de sus labios, de repente a Hermione le quemó el anillo “ feliz año nuevo” y a él la pulsera “ feliz año nuevo” los dos sonrieron y siguieron en la fiesta, ahora ambos bailaban una canción lenta como aquella noche en el patio, los dos muy juntos ella tenía su acabeza apoyada en el pecho de Draco y él apoyaba su barbilla en la cabeza de la chica, ella tenía sus manos en la cintura del chico y él también en la de ella. 

Empezó a sonar un tango, Hermione miró sonriente a Draco, éste le decía que no con la mirada, pero demasiado tarde ella le llevaba al centro de la pista y empezaron a bailar, todos se concentraron a su lado y al acabar aplaudieron, aun que pensaban que era raro que ellos dos bailaran así de bien, no había Slytherins de por medio. 

Al acabar la velada eran las 5 de la mañana, Harry se fue a su torre mucho antes para mandarle una lechuza a Ginny, Blaise estaba con una chica de Hufelpuff en una esquina del gran comedor, Hermione se despidió de Draco para irse a su cuarto, pero éste le acompañó. Al pasar por el lado de Blaise éste abrió los ojos mientras Draco le hacía señas de que se iba, él le guiño un ojo, Hermione le sacó la lengua y el frunció el ceño, pero se acordó del regalo y le señaló el pecho y la cintura, para después guiñarle un ojo y levantarle el pulgar, Hermione se puso roja y le levantó un dedo, pero no fue el pulgar precisamente. 

Los dos fueron en silencio hasta su torre, Hermione caminaba descalza, los tacones le habían dejado los pies destrozados, Draco llevaba la corbata deshecha la camisa abierta y por fuera del pantalón y ambos reían. 

Llegaron a la torre. 

- Has visto donde dejé mi capa?... – preguntó Draco.
- Si, estaba en la silla que tienes en la habitación, te la dejé ahí esta tarde. 
- Voy a por la capa. – hacía frío en la sala común, mientras Draco iba a por su capa Hermione se sentó en el sofá y encendió la chimenea. – uuf! Que frío hace! Toma!- le tiró la capa por encima y él se sentó a su lado tapándose también con la capa. 
- Me lo he pasado genial esta noche. – dijo Hermione con una sonrisa.
- Si, yo también. 
- Por cierto, te a curado el corte Blaise?.. – él hizo una mueca de olvido.- supongo que eso es un no.. – la chica empezó a reír.- que pena.. – Draco levantó una ceja y la miró.
- Por que és una pena?.. – se acercó al cuello de la chica y le dio un pequeño mordisco. Hermione levantó la cara y le miró a los ojos mientras se acercaba a él, cuando ya estaban rozándose sus labios le dijo.
- Por que te vas a quedar con las ganas. – ella rió y se levantó del sofá saliendo corriendo, pero él la persiguió hasta la habitación de la chica, la giró y la besó poniendo sus manos en la pequeña cintura de ella, ella empezó a quitarle la corbata y le abrió la camisa entera, se separó de él. – bueno, siempre puedo curártela yo.. no?..- él rió y fue a su cuarto, al volver la castaña estaba sentada esperándole con la varita en la mano. Cogió el bote de poción y empezó a desabrocharle el pantalón a Draco, pero éste se lo prohibió. 
- Señorita, me parece que se lo tiene que ganar.. – ella frunció el ceño y le besó. Entre besos y caricias, la ropa fue sobrando Hermione había dejado la poción y la varita en la mesa, ya que necesitaba las manos en esos momentos, Draco seguía besándola y acariciándola. – con que te pongas lo que te regaló Blaise.. suficiente. –le susurró al oído, ella le tiró a la cama y se puso encima suya como podía, por la falda larga. 
- Igual te llevas una sorpresa. – le dijo riéndo. 

Así entre juegos Hermione llegó a ponerle la poción a Draco y él disfrutó del regalo de su amigo, pues había acertado. 

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