Te Amo [HopeV]

•Desamor Ocho

A esas personitas que comentan,¿qué quieren para navidad? Jajajaja Las adoro
🙏😭❤
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—Lo siento... —murmuró el mayor con tristeza.

—Dale Tae, no te preocupes—respondió sin recibir respuesta. —Necesitabas desahogarte, todos necesitamos hacerlo de alguna manera.

—¡Pero no así! —respondió alterándose el castaño— No ... No quiero ser como Hoseok.. —susurró, sintiendo sus ojos cristalizarse de nuevo.

JungKook puso una cara de asombro por la respuesta del mayor. Él sabía que Jung Hoseok se había vuelto un hombre frívolo, un puto cabrón, que solo respondía con golpes a todo. Y al ver que TaeHyung lo reconocía le dio mas tristeza. Si sabía eso, ¿Por qué aun seguía a su lado?

TaeHyung estaba limpio. JungKook se había encargado personalmente de curar sus heridas y además de eso, le presto ropa limpia a TaeHyung.
El menor lo veía y no podía creer como alguien podía ser tan perfecto. Le dolía saber que él no lo amaba, pero eso no le importaba. No iba a darse por vencido tan pronto.

—Será mejor que me vaya —dice el mayor mirando el reloj que cuelga en la sala.

—¿Piensas regresar? —gruñe, sin creerlo. —TaeHyung..

—Hobi debe estar apunto de llegar a casa —responde el mayor sin mirarlo a los ojos. Se levanta del sillón donde estaba sentado, alisando su ropa mientras intentaba no hacer contacto visual.

—TaeHyung, no puedo permitir que regreses allí. —confiesa, mientras intenta acercarse y tocar la mejilla de TaeHyung.—¿Qué esperas? ¿Qué te mate?

—JungKook, basta. Sabes que amo a Hoseok —aclaró retrocediendo. Odiaba herir a JungKook, pero quería dejarle las cosas en claro. —Él no es una mala persona... Tú lo sabes —lo defiende intentando creerse sus propias palabras— solo necesita un poco de ayuda.. Y se que yo se lo puedo dar. —sonríe débilmente.

TaeHyung no espera la respuesta de JungKook. Se despide de él con un abrazo fugaz, saliendo de su casa.
El mayor puede soltar un suspiro atrapado en sus labios al estar afuera. Comienza a caminar lo mas rápido posible, no quería imaginarse que le haría Hoseok si no lo encontraba en casa.

A medida que se iba acercando a su casa. TaeHyung sintió cada vez sus pies mas pesados.  Se preguntaba como terminó así. Al empezar su relación con Hoseok, creía que todo sería hermoso, pues le bastaba ver su sonrisa y sentir sus suaves labios día a día. Pero aunque odiaba admitirlo, ahora, lo único que recibía eran golpes y ofensas.

¿Que había pasado con su Hobi?

No tenía a nadie a quien recurrir, sus amigos ya se habían alejado porque TaeHyung le dio mas prioridad a Hoseok. El único que siempre estaba a su lado era JungKook, pero no era igual, sabía que estaba enamorado de él y no podía corresponderle.

TaeHyung se agachó tomando una llave que estaba debajo del macetero y abrió la puerta. Suspiró con tristeza al entrar. No iba a negar que ahora este lugar le deprimía.
Cerró la puerta con delicadeza y sin mucha energía.

La casa estaba en silencio, por lo que dedujo que Hoseok no había llegado aún. Comenzó a caminar lentamente hacia el segundo piso. Quería dormir y no despertar.

—¿Donde estabas?

TaeHyung giró su rostro agresivamente hacia la dirección de donde provenía la voz, encontrándose con esos bellísimos ojos que lo volvían loco. HoSeok estaba en el sillón, mirándolo, con las piernas cruzadas elegantemente. Soltó un suspiro al darse cuenta cuan hermoso era su novio. Su cabello negro lo hacía ver tan seductor, su labios finos y delgados junto a su perfil perfecto. Realmente Hoseok era digno de haber sido creado por Dioses.