Códigos De Amor.

Capítulo 22: Enemigo al Ataque.

Comenzaba la segunda semana de estadía en el campamento. Era ya el tercer día y todo seguía en las mismas condiciones. Los senseis continuaban con los entrenamientos, querían que sus alumnos fueran fuertes y rápidos. Hacían competencias entre clases y escuelas. Los de primero, contra los de segundos, los de tercero entre ellos y así para seguir con un largo día por delante.
Llegaba al fin la tarde, una brisa fresca acompañaba el atardecer, habían varios alumnos fuera de las cabañas disfrutando del aire libre. Pidieron permiso para hacer una parrillada improvisada, a lo que los senseis aceptaron con gusto.
Fuego abrazador, parejas alrededor de éste, carne, verduras y algo para beber.

-Ojalá no pasaran tan rápidos los días- dijo Todoroki quién tenía a Midoriya entre sus piernas abrazado.

-Pero llegando a casa, ¿tendremos nuestra cita?.

-Por supuesto, iremos dónde tú quieras.

-Shõto, iremos dónde los dos queramos.

-Sí- le respondió con un suave beso.

Si viene cierto ya toda la clase sabía de la relación que sostenían los y las alumnas, Mina y Hagakure amaban ver a los chicos besarse. Claro que la chica invisible debía disimular su lado fujoshi, pues a su lado estaba Ojiro, aunque la chica ignoraba que éste era un fudanshi.

-Nos quedan pocos días acá- le decía Shinsõ a su rubio- Al volver me gustaría que salieramos.

-¿Me propones una cita Hito?.

-Por supuesto, desde que somos novios aún no hemos tenido nuestra cita.

-De acuerdo- le dijo robandole un beso.

-Todos tendrán citas- dijo molesto Kaminari- ¿Y nosotros?.

-Denki, no puedes pretender hacer lo mismo que los demás.

-Eso es un no!!.

Sero se puso a reír.

-Bueno, sí él no quiere salir contigo, puedes salir conmigo- detrás de ellos Shinshikura tentaba al destino.

-Repitelo maldito infeliz- dijo Sero poniéndose de pie.

-Basta!!- gritó el chico eléctrico levantándose del pasto- Hanta calmate- le dijo a su novio- Y tú déjame en paz, jamás saldría contigo- dijo mirando al chico de ojos rasgados.

-Bien, tú te lo pierdes- le contestó caminando en dirección a sus compañeros.

-Lo voy a matar!!.

-Calmate Sero- le dijo Kirishima- Kaminari ya le dejó las cosas en claro.

-Dime Kirishima- respondió Sero- Qué pasaría sí Bakugõ fuera acosado- el nombrado se puso rojo.

-Lo mato- dijo sin más el pelirrojo.

-Entonces no me pidas que me calme.

-Esta bien.

A lo lejos, unos rostros conocidos se iban acercando al grupo de la clase A.

-Midoriya-kun!! No había podido hablar contigo!.

-Togata-senpai, Tamaki-senpai, Hadou-san, cómo están- les saludó  el peliverde.

Los tres chicos tomaron asiento.

-Estamos bien, con hartos proyectos encima, pero bien.

Amajiki se le iban los ojos hacia Kirishima, quién tenía abrazado por atrás a Bakugõ. El chico explosivo miraba al senpai con cara de pocos amigos. Sólo para molestarlo, acariciaba las manos del pelirrojo que tenía sobre su abdomen, Kirishima sentía el suave roce de las caricias del ojirubí, respondía dándole besos en el cuello, lo que hacía sonrojar a Katsuki.