I Like Me Better || Jeno NCT

Capítulo 4. Universitarios.

P.O.V Jeno.

Me quedé fuera, esperando que llegasen. Ya le había devuelto el telefono a Ann, pero ni si quiera se había dado cuenta ya que estaba demasiado centrada en el "yoga"

Un coche aparcó frente a mi, pero no eran los chicos sino Yuta.

Yuta, era el hermano mayor de Ann, y tambien era como mi hermano.

A veces él parecía mas hermano mío que de ella, aunque tambien Lisa parecía mas hermana suya que mía.

Creo que nacimos en familias distintas.

Yuta salió del coche, junto con 4 chicos, todos llevaban maletas y mochilas.

Él no vivía en la casa, sino en una residencia de estudiantes ya que estaba en la universidad, así que solo habia una teoría, a él tambien le habían dado vacaciones.

-¡Jeno! ¿Qué haces aqui? ¿Cómo estas bro?

Se acercó y me revolvió el pelo. Mientras se ponía bien la mochila en el hombro.

Los chicos que venían con el tambien se acercaron.

-Mira te presento a mis compañeros de la universidad, Johnny, Taeyong, Taeil, y Jaehyun.

Me los fue señalando uno a uno, y parecían bastante simpáticos, todos me saludaron ya fuese con la cabeza o con la mano.

-Chicos él es Jeno, mi hermanito pequeño.

-¿No se llamaba Chenle?

Preguntó el mas alto, creo que se llamaba Johnny.

-No parece que tenga la edad que dijiste se ve muy grande.

Dudó ahora quien creo que era Taeil.

-No es mi hermano, solo es un amigo de la familia y lo conozco desde pequeño por eso lo digo idiotas.

Sonreí y todos parecían pasar de lo que decía Yuta.

-¿Qué haces aquí y por qué estas fuera?

-Pues es una historia muy larga, creo que es mejor que te lo cuenten dentro.

-Oh sí es verdad, vamos chicos, vamos a instalarnos.

¿Instalarnos? ¿Va a meter a sus amigos en su casa asi de fácil?

-¿Vienes Jeno?

-Mm no me quedaré aquí.

No dijo nada, solo siguió su camino hacia el interior de la casa mientras sus amigos le seguían por detras.

P.O.V Ann

-Y ahora bajamos... seguimos bajando... muy bien, hasta llegar al suelo.

La mujer de la television hablaba y hablaba, y hacía movimientos raros, que al parecer solo eran dificiles para mí, por que mi madre y la señora Lee los hacían sin ningun problema.

El timbre sonó, y di gracias al cielo por que estaba segura que no llegaría muy lejos con el movimiento que explicaba esa mujer.

Abrí la puerta, y mi cara debía de ser un poema cuando vi la gran sonrisa de mi hermano detrás.

Soltó la bolsa y abrió sus brazos, tardé un milisegundo en saltar y abrazarlo.

-¡Principe de Osaka!

Grité de la emoción, hacia casi un año que no lo veía.

-¡Reina del helado!

Me contestó él. Nuestros apodos eran simples pero tenian un gran significado de nuestra infancia.