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El año 1959 fue de los más hermosos modelos mostrados por la firma inglesa Aston Martin. Decimos esto porque su modelo DBR1 consiguió copar las dos primeras posiciones de las 24 Horas de Le Mans. Un hito histórico que la marca aún presume y que ha querido rendirle homenaje.
Aprovechando al Aston Martin DBS Superleggera, los británicos salieron al ruedo con una edición especial de su deportivo más capaz, dándole un aspecto visual diferenciador del resto, además de tener detalles exclusivos que no pasarán desapercibidos para nadie. Eso sí, solo 24 ejemplares saldrán a la venta.
El Aston Martin DBS 59 presenta elementos que rememoran al icónico auto de carreras. El principal es un trabajo de pintura verde Racing Green que contrasta con la fibra de carbono brillante. El deportivo también tiene de detalles en bronce en la parrilla, el alerón y los cauchos, sin obviar un sistema de frenos con calibradores en este tono. Una belleza.
Al ingresar al interior, los conductores verán un mix de cuero negro y castaño, y una tela que se inspira en el asiento del longevo DBR1. No obstante, también hay tonalidades verdes de competición, bronce y bordados con el logotipo "DBS 59".
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Por otro lado, el departamento Q de Aston Martin pone en el mercado una serie de productos que recuerdan a aquella época, como unos monos de competición azules, guantes estilo vintage y una réplica del casco utilizado en el año 1959. Además, recibirán un juego de maletas de equipaje que encajan perfectamente con el diseño del interior. Se cuidaron hasta los más mínimos detalles.
Si hablamos de las prestaciones mecánicas, se sigue encomendando a un propulsor V12 sobrealimentado de 5.2 litros, con 725 caballos de fuerza y un par máximo que le permite alcanzar hasta los 900. Todo está conectado a una caja automática de ocho velocidades que te hará sentir la adrenalina de acelerar de 0 a 100 km/h en 3.4 segundos antes de llegar a una velocidad máxima de 339 km/h.
