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La mañana llegó más rapido que un parpadeo. No tuve tiempo  de procesar todo lo que había pasado en esa cena, pero tampoco era como si tuviera sueño, me levanté más temprano de lo normal, ya Lita se había ido a vender algunas cosas, preparé café, me disponía a sentarme pero el sonido de un auto afuera de casa me lo impidió así que me asomé por la ventana, era é,l enfundado en unos pantalones negros y una camisa de seda del mismo color, mi corazón retumbó como tambor ¿Porqué tenía que ser tan gloriosamente hermoso?, Se acercó con gracia hasta tocar la puerta, y mi me tomó unos segundos recomponerme y abrir la puerta.

--mi amor, buenos días, espero no haberte despertado-- sonrió y yo  parpadeé varias veces.

-- ¿qué haces aquí?.

--¿Cómo que qué hago aquí?-- entró mirando a todos lados --vengo a hablar con mi suegra, soy un hombre serio Serena.

--No-- murmuró --no le voy a mentir a mi madre.

--¿Ah no? Entonces vamos, dile que me venderás un hijo a cambio de su salud, quiero verlo-- sonrió malicioso y yo guardé silencio --como lo pensé, nadie tiene porqué enterarse, haremos las cosas bien y al final todo estará en calma

--Sere, ¿Quien llegó?-- Darien acomodó un mechón de cabello rebelde y entró a la pequeña habitación pasando una cortina --Señora Ikuko,  ¿Puedo llamarla así cierto?-- sonrió y extendió el ramo de rosas que a penas me había dado cuenta que traía en las manos --cuanto tiempo-- rodó una silla hasta el borde de la cama.

--señor Chiba-- mi madre se incorporó un poco en la mullida cama y tomó las flores --No debió molestarse.

--oh no, llámeme Darien,  y no es ninguna molestia, vine a hablar con usted-- me quedé atrás de él, quería llorar, ese hombre dejó claro una vez más que tenía el control de todo y yo no tenía derecho a opinar.

--lo escucho-- acomodó las rosas a un lado de la cama

--vine a pedirle la mano de su hija, quiero casarme con ella lo más pronto posible.

--¿Qué?-- mamá  empezó a toser y me tocó auxiliarla con el oxígeno.

--¡Mamá!-- casi lo mato con la mirada  pero por primera vez lo vi asustado por algo.

--que amo a su hija y quiero formar una familia con ella-- tomó la mano de la rubia después de haber ayudado a calmar a su madre --Tenemos unos meses de novios ¿Cierto cariño?.

Mamá buscó mi mirada, yo no sabía que hacer, asi que respiré hondo tomando toda la fuerza que podía en mis pulmones y asenti --si mamá-- la mentira había comenzado.

--Pero usted la despidió.

--oh, solo fuè una pantalla de humo, pero ya estamos listos para hacer público nuestro noviazgo y futuro matrimonio-- acarició mi mejilla, su mano era suave y cálida, ese contacto me supo a gloria

--Sere ¿Estás segura de todo esto?.

--si mamá, yo lo lo amo-- no mentía en eso, lo amaba con locura desmedida.

--Si tu lo amas y si él te ama entonces está bien para mi, sé que los Chiba son una buena familia que no hacen distinciones sociales, eso me alegra mucho, sabré que mi hija no estará sola cuando me valla-- sonrió.

--m-mamá-- me quebré --no digas eso por favor.

--Respecto a eso, déjeme cubrir su plan de salud, tengo un amigo con una clínica que está capacitada para ayudarla.

--No puedo aceptarlo.

--mamá-- tomé sus manos --Es una gran oportunidad, lo que siempre soñamos, hazlo por nosotras ¿Si? Por favor-- mi madre suspiró.

--No puedo negarte nada con esa carita, pequeña, está bien, no perderemos nada y podemos ganar mucho.

--Tú madre sabe de negocios-- sonrió --harè una llamada y en un rato la ambulancia estará aquí.

--Gracias joven, por fijarse en mi hija.

--Gracias a usted y a su hija por aceptarme-- sonrió y me  quedé  hablando con mi madre hasta que se durmió.

--Todo está listo Serena, tú madre estará en las mejores manos-- me abrazacé a mí misma aunque no tuviera frío.

--Bien, debo buscar a Lita.

--Mmm-- miró su reloj de pulso --De echo debe estar en la empresa a esta hora poniéndose al corriente sobre su nuevo trabajo-- sonrió con suficiencia

--Eres eficiente

--Estoy cumpliendo con mi parte, ahora falta la tuya, si te equivocas todo esto se derrumbará como castillo de naipes querida.

La ambulancia llegó y ellos la siguieron en el Ferrari negro --aprovecharemos que estaremos en la clínica y te harás todos los exámenes médicos pertinentes, lo del hijo quiero que sea lo más pronto posible

Hagamos un trato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora