¡Jungkook No! [KookJin]

» ¡Veintidos!

Una semana.
Martes.

— ¿Estás bien?

Esas dos simples palabras me hicieron sentir muchísimo peor de lo que ya me encontraba. No respondí a la pregunta que me había hecho con una notable preocupación Jimin. No se me apetecía en lo absoluto hablarle sobre mi estado. Desde el día de ayer estaba ido, sin vida.

Y para rematar mi estado, Jin hyung no se ha aparecido el día de hoy, ni siquiera un mensaje algo. Me duele que haga esto, sé que puedo ser torpe para tantas cosas pero... ¿Dejarme? El simple hecho de que ese maldito pensamiento esté presente me rompe.

— Jungkook... por favor, háblame — La voz de Jimin hace que la nube de pensamientos negativos se disipe y me centre en él. Lo miro por extensos segundos, antes de pasar la lengua por mis resecos labios y con las pocas ganas que tenía, hablarle.

— No, no estoy bien, Jimin.

¿Para qué mentirle? No serviría de nada, sólo me hundiría más en mi miseria. Jimin guardó silencio mientras yo por otro lado me ignoré su presencia y me centré en el constante juego entre mis dedos que estaba manteniendo. Hoy no me fuí a la secundaria justificándome con el hecho de que me encontraba mal, me encontraba enfermo.

Yugyeom vino ahora temprano insitiéndome en que fuera y que él me ayudaría a andar con las muletas pero yo con mi orgullo a flote y la ira que sentía, me negué rotundamente.

Estúpido, ¿no?

Lo sé. 

— Por favor... — Ahora la voz de Jimin se escuchaba como un ruego — Me preocupo mucho por ti, dime qué pasa Jungkook. Dime qué es lo que tienes.

Me limité a soltar un suspiro lleno de exasperación. Estaba molesto conmigo mismo. Jimin había llegado yacía un rato con la excusa de que no respondí sus mensajes y el estúpido de Yugyeom no le dijo nada sobre mi condición. Por ser Jimin, lo dejé pasar, porque mi plan era hacer todo lo contrario, ahora estábamos en mi habitación. Yo con una manta sobre mis piernas, intentando tragarme la mala noticia. Lo miro directamente a los ojos.

— Jimin, ¿quieres saber que es lo que me tiene malditamente mal? — Jimin se limita a asentir en respuesta. No me preocupé por mi mal vocabulario, él sabe que cuando estoy molesto, tengo un vocabulario malo. Quité la sábana de mis piernas dejando mi tobillo vendado.

Jimin suelta un grito ahogado de sorpresa. Él, desde el punto de vista como bailarín, sabe a la perfección que este tipo de cosas son las peores que te pueden pasar. Él me mira y yo repito su acción. Luego abre sus ojos de manera exagerada dando a entender que ha captado el por qué estoy tan mal.

— La audición es el domingo... — Soltó en un susurro aún en estado de shook. Yo asentí, dolido porque la realidad me ha dado un cachetada — Lo siento tanto Jungkook, qué tonto soy.

Negué soltando otro suspiro — No es nada. Fue por mi estúpida culpa que me ha pasado esto. Por favor, lo que menos quiero que sientas es pena por mi.

Él se limitó a asentir.

+

— ¡Oh vamos, Jungkook! No seas tan amargado — Se queja Yugyeom viéndome mal, ¿cómo quiere que esté? ¿Feliz? Él copia mi acción, pero haciéndolo ver de manera más graciosa. Mi ceño fruncido se conviertió en una sonrisa — Ah, ahí está la sonrisita de rata que tanto me gusta.