- ¡Despierta! ¡Despierta! ¡Despierta! ¡Despierta! - oigo una voz conocida.
Al abrir los ojos puedo ver al pesado de Luke Hemmings; mi mejor amigo.
- ¿Cómo has entrado? - le pregunto mientras me froto los ojos con ambas manos.
- Bueno, no fue muy difícil, tu madre me dejó entrar. - me contesta sonriendo pícaramente.
A veces olvido que vivo con mis padres, se pasan todo el día trabajando. Mi madre seguramente está punto de marcharse y mi padre ya ni estará. ¿Hasta cuando? ni idea. A veces se quedan a dormir en el trabajo y me quedo sola durante días. Sé que suena alocado pero mis padres piensan que soy lo suficientemente madura. ¿Qué puedo decir? solo tengo 16 años, tampoco deberían confiar tanto en mi.
- (Tn) ¿estás bien? - me pregunta Luke, acercándose.
- Bueno... acabas de aparecer de repente despertándome de un precioso sueño que estaba teniendo y ahora estoy intentando volver a la realidad empezando por en qué día de qué año me encuentro. - le respondo mientras me levanto y me dirijo al baño.
Al entrar le cierro la puerta en las narices, pero pronto puedo sentir cómo se apoya en la puerta y sigue hablando desde el otro lado.
Habla sobre lo que tiene pensado hacer antes de que empiecen las clases. Solo quedan unas semanas y... ¿quién no odia el insti? cuando acabo de asearme salgo sin ni siquiera mirarle y me encierro en mi cuarto para vestirme. Él sigue hablando. Me pongo unos shorts vaqueros altos con una camiseta de manga corta blanca y unas viejas vans negras. Me dejo el pelo suelto y me preparo para abrirle la puerta a Luke.
Cuando la abro, este ya no habla. Me sonríe y me abraza.
- Ya estoy lista. - le digo sonriente.
- Tan guapa como siempre. - dice él lanzándome un beso. - ¿No vas a desayunar?
- No, hoy no me apetece. - digo bajando las escaleras - ¿a dónde vamos?
- Pues he pensado que podíamos dar un paseo por la playa.
- Me parece genial. - digo mientras abro la puerta de la entrada y salimos.
Yo vivo en un piso. Cuando me independice, tengo pensado irme a vivir a una casa.
Estamos saliendo del portal, cuando nos encontramos con el vecino más sexy y borde del planeta. Señoras y señores, Calum Thomas Hood. Nunca me saluda, de hecho casi ni me mira. Sin embargo, esta vez, lo veo sonreír como nunca antes lo había visto. Evidentemente le sonríe a Luke, no a mí. Luke le devuelve la sonrisa y se saludan.
- ¿Acabo de ver a un miembro de la familia Hood sonriendo? - le pregunto a Luke cuando ya habíamos salido del portal.
- Lo dices como si fuera raro. - me mira extrañado.
- Lo es. Dime cual es tú secreto para que te sonrían así.
- No hay secreto. Los Hood son conocidos por ser personas muy agradables. No conozco a nadie a quien le caigan mal.
- ¡A mí! - digo frustrada - Ese Calum nunca me ha saludado desde que tengo uso de razón. Es el vecino más grosero del planeta. Y lo de sus padres es peor aún. Ellos me miran, sí, pero me miran con asco.
- ¿Estás hablando de los Hood? porque cualquiera que te escuche pensaría que estás chiflada.
- ¿No lo viste? ni siquiera me miró.
- No le des más vueltas al tema. -me dice Luke abrazándome.
Vamos a la playa a dar un paseo, pero por alguna razón noto a Luke incómodo. Como si algo le preocupara. Yo no puedo verle así y en alguna ocasión le pregunto si le pasa algo. Él me dice que no le pasa nada, pero es mentira. Me resultaba raro. Normalmente cuando yo y Luke estamos juntos, los dos estamos muy tranquilos.
Cuando estamos enfrente de mi casa, le abrazo.
- Sé que te pasa algo. Has estado todo el día muy nervioso. - le digo al mismo tiempo que nos separamos.
- Sabía que lo ibas a notar, pero quería tener un día de relax, sin pensar en nada. Aun así, ha sido difícil olvidarlo...
- ¿Qué te ocurre?
- Mi abuela está muy enferma... lleva desde la semana pasada en el hospital. - dice derramando una lágrima.
Yo le abrazo de nuevo y le seco las lágrimas. Nunca antes le había visto llorando. Pero él es muy valiente. No me había contado nada para no preocuparme.
-Luke, tienes que ir a verla y estar con ella en el hospital. No te preocupes por mí.
Él me abraza y yo le doy un beso en la mejilla. Cuando se va, entro en el portal. Cuando llego a mi piso, me doy cuenta de que estoy sola y aún me queda energía. Así que me pongo a hablar con mi amiga Perrie por teléfono. Le pregunto si se quiere venir a dormir y ella acepta. También invito a Aleisha, otra amiga. Preparo comida y unas pelis. ¡Hora de una fiesta de pijamas!
Pican al timbre y al abrir, las dos chicas se abalanzan a abrazarme.
-¡Aquí estamos!-grita Perrie lanzando su mochila al suelo.
Se ponen sus pijamas. El mio consiste en unos shorts azules con una camiseta de tirantes a juego. El de Perrie es igual pero la camiseta es de manga corta y es de los colores negro y blanco. Y el de Aleisha es un camisón rosa claro.
Empezamos viendo la película de Annabelle. Después comemos pizza y decidimos jugar a un juego que consiste en hacer preguntas incómodas a las que tienes que responder sí o sí.
-(Tn) es tu turno.-dice Perrie intentando ponerse seria.
Giro la botella. Después de que gire varias veces, se para en Perrie. Toca el tema 'amor'. Tenemos que tener asignadas una pregunta cada una y respondemos a la vez.
-¿Alguna vez le has sido infiel a Zayn?-le pregunto mirándole fijamente.
Zayn es su novio. Llevan saliendo varios meses y parece que les va muy bien.
-¿Te gusta Luke? cada vez que está cerca tuya te veo algo diferente.-suelta Perrie mirando a Aleisha rapidamente.
Los cierto es que cada vez que Luke está a su lado, está como muy cortada. Es es una gran pregunta. No puedo evitar una ligera risa.
-¿Te gusta Calum?¿Calum Hood?¿tu vecino?- suelta Aleisha al ver que la pregunta anterior me resulta divertida.
¿A qué viene eso? yo les he hablado alguna vez de él. Pero solo les he dicho que no me hablaba. Como mucho que me parece mono.
-No puedo contestar a esa pregunta.
-¿Por qué no?
-Se puede decir que solo le conozco de vista, nunca le he hablado.
-Simplemente contesta ¿te gustaría besarle?
Eran tres preguntas. ¿Perrie le fue infiel a Zayn? ¿A Aleisha le gusta Luke? ¿Estoy dispuesta a besar a Calum?
-Vale. Vamos a contar todas hasta 3. A la de 3, cada una responde sí o no. Todas a la vez.
1...
2...
¡3!
Las tres chicas alzan sus voces haciendo sonar 3 'sí'.
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Mi droga
RomanceQuién me iba a decir que mi vecino, la persona más borde y odiosa del planeta, se convertiría en mi mayor adicción.