Mi droga

Capítulo 16

Abrí los ojos. Calum me estaba mirando. Daba la sensación de que llevaba un rato observándome.

-Buenos días preciosa.- dijo besando mi frente.

-Hola. ¿Me observabas mientras dormía?

-Sí. ¿Te importa?

-Supongo que no.- sonreí. Me levanté y entré en el baño con algo de ropa de deporte. Cuando salí, Calum no estaba en la habitación. Yo tenía que ir al gym. Agarré mi saco y bajé. Me bebí un zumo y le envié un mensaje a Calum, ya que le había cogido el número.

-Calum, voy al gym. Si quieres ya nos vemos allí. Te has dejado la camiseta, pero tranquilo. Pienso usarla como pijama. Nos vemos♥

Fui al gym y al entrar alguien me abrazó por detrás. Era Ash.

-¡Cuanto tiempo (tn)!- rió este.

-Sí.- sonreí. Al entrar saludé a Michael. Perrie estaba hablando muy animada con él. Les conté a los tres que estaba saliendo con Calum. ¡Quería gritarlo a los cuatro vientos! Me felicitaron y me puse a boxear con Ash, como siempre. Calum no apareció. ¿Habría recibido mi mensaje? Estaba preocupada. Al llegar al portal le vi.

-¿Lista?

-Ehm... Lista ¿para qué?

-Para ir a la pelu.- rió.

-Ehm vale.- le miré sorprendida- ¿Por qué no viniste al gym?

-Me daba algo de pereza.- rió tímidamente. Al llegar a la pelu, nos separamos y nos pusimos las mechas. Al acabar me miré al espejo. Mechas californianas rubias sobre mi pelo castaño. La verdad es que me gustaba el resultado. Sentía curiosidad por Calum. Al verle me puse las manos en la boca.

-Eres un ángel.- dijo él besándome.

-Y tú una estrella de rock.- reí- Estás guapo.

Fuimos a casa hablando de estrellas de rock. ¿Por qué habría sacado el tema? A Calum le brillaban los ojos cada vez que hablaba de ello. Se notaba que amaba la música. Seguramente era la tercera cosa que más amaba en este mundo. Al llegar a casa, nos despedimos y subí arriba. Comí unos macarrones y me vestí para el parque de atracciones. Me puse unos pantalones ajustados negros, la camiseta granate de Calum y unos playeros blancos. Cogí algo de dinero y salí de casa. Después de unos minutos esperando, ahí estaba Luke. Venía en coche. Se bajó y nos abrazamos. Después me subí a su coche.

-¿Lista para la diversión?- dijo ya en la carretera.

-Siempre.

-Te queda bien ese nuevo estilo.

-¿Qué?

-El pelo.- sonrió. Ya estábamos bastante alejados de mi casa.

-Ah... Ehm gracias.- sonreí. Decidí no contarle lo de Calum.

-¿Esa camiseta no es de Calum?- preguntó frunciendo el ceño.

MIERDA.

-Ehm... Sí. Nosotros... Estamos saliendo.- dije tímidamente.

-Ohu...- dijo Luke poniéndose serio.- Felicidades...

-Uhm... Gracias.- respondí seca al notar su cambio de humor. El trayecto fue silencioso. De repente, Luke paró el coche.

-¿Qué ocurre?

-No nos engañemos, tú no quieres ir conmigo al parque de atracciones. Quieres ir con Calum.

-Eso no es cierto.

-No me mientas.- dijo mirándome serio.

-No te miento, me gustaría ir con él. Pero voy contigo y eso me hace feliz, porque tú eres mi mejor amigo.

-Ese es el problema.

-¿El qué?

-¡No entiendes nada! ¿Verdad?

-Ehm... Luke...- tartamudeé nerviosa. Quería salir de ese coche. Ir a los brazos de Calum. Me sentía incómoda. ¿Por qué me trataba así?

-(Tn), yo te amo. Siempre te he amado. Y me duele verte con Calum. Él no es bueno para ti. Él no te quiere.- dijo golpeando el volante.

-¡Sí que me quiere!- grité histérica- Y solo yo sé lo que es bueno para mi.

-Te vas a hacer daño.

-Luke, callate. Por favor.

-Pensaba pedirte salir hoy. Declararte mis sentimientos en la noria... Pero ya veo que no tiene sentido hacer eso.- dijo enfadado. Me miró. Yo estaba asustada. Quería salir de ese coche del infierno. Pero Luke me besó en los labios inesperadamente. Cuando el corto besó acabó, me separé.

-Luke, yo conozco a los chicos como tú. No querías ser mi amigo. Solo lo fuiste porque te gustaba. Eres un maldito falso. Y te odio.- dije entre lágrimas. Salí del coche. Luke me llamaba, pero yo salí corriendo.

¿Dónde estaba?

Ni idea.

Simplemente salí corriendo tan rápido como mis piernas me permitían.