Las tres nos quedamos calladas durante varios segundos. No sabía qué decir. Lo de Aleisha me lo esperaba, pero lo de Perrie me había pillado completamente por sorpresa. Ella siempre había alardeado de lo guapo que era su novio y de la buena pareja que hacían. ¿Quién se iba a imaginar que nada era tan perfecto cómo parecía?
Aunque pensándolo bien, lo más grave era lo mío. Ni siquiera yo me creía que hubiera dicho eso en voz alta.
-¡No me lo puedo creer!- gritó Aleisha mirándome sorprendida.
- ¿Qué? - me limité a responder.
- ¡Te mola Calum!
- ¡No he dicho eso! solo he admitido que está bueno. De ahí a gustarme hay un trecho.
- Cariño, por ahí se empieza. Por la atracción física. - intervino Perrie en la conversación tan tranquila.
- Tú nos debes algunas explicaciones, creo.
- Todas las debemos. No estamos contándonos las cosas. - dije sintiéndome algo culpable. Antes estábamos muy unidas, pero está claro que el tiempo nos fue distanciando.
- ¿Puedo empezar yo? está claro que he hecho la afirmación más grave. - dijo Perros, rascándose el cuello, pensativa.
- Está bien. - asentimos Aleisha y yo casi a la vez.
- Ocurrió hace un mes o así. Yo salí de fiesta con Jade y Jesy... solo quería pasármelo bien. Salir de la rutina. Ya sabéis que paso la mayor parte del tiempo con mi novio y quería darnos un poco de espacio...
Se quedó callada de repente. Noté como se mordía el labio, como aguantando las ganas de llorar. Le puse una mano en la espalda y se la acaricié suavemente, como dándole ánimos. Ella tomó aire antes de hablar.
- Un chico se me acercó. Yo llevaba encima unas copas de más... y bueno. Surgió. Tengo que decir que al día siguiente me sentí súper mal. Pero no me atreví a hablarle a Zayn de ello. Me doy tanto asco por eso... no os podéis hacer una idea.
- Estabas borracha, Perrie. No sabías lo que hacías. - dije tratando de consolarla.
- ¡Eso no es excusa!
- Mira el lado positivo. - intervino Aleisha quitándole importancia al tema.
- ¿Se supone que hay uno?
- Sí. Cómo bien dices Zayn y tú pasáis mucho tiempo juntos. Tal vez la rutina...
- No empieces con eso, enserio. Es lo que me suelta todo el mundo. Si compartimos tanto tiempo juntos es porque ambos queremos.
- ¿Entonces? ¿si estabais bien por qué lo hiciste?
- ¡No lo sé! - gritó Perrie claramente agobiada.
- Bueno, creo que se acabaron las preguntitas. - dije mirando seriamente a Aleisha.
- ¿Podemos saber con quién fue? - siguió insistiendo Aleisha. Ese era uno de sus claros defectos, la insistencia.
- Justin Bieber.
No pude evitar abrir un poco la boca por la sorpresa. Sabía de sobra quién era. Y Aleisha, tan sorprendida como yo, también. Perrie era nuestra amiga, y eso significa que no éramos nadie para juzgarla. Debíamos estar a su lado, y más ahora. En mi opinión, si esto pasó fue porque su relación con Zayn no iba a ningún lado. Soy de las que creen que el destino va poniéndonos en nuestro lugar. Nos empuja a cometer errores para encontrar nuestro camino.
- No te vamos a juzgar por ello, pero tienes que decírselo a Zayn. Y la verdad, cuanto antes mejor. - dije mirando a Perrie a los ojos. Esta se secó las lágrimas y me dedicó una sonrisa agradecida.
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Mi droga
RomanceQuién me iba a decir que mi vecino, la persona más borde y odiosa del planeta, se convertiría en mi mayor adicción.