Compañeros - Kookmin

Nueve

Por la noche de ese día, luego de mi reunión con Nayeon, cuando volví a mi dormitorio después del trabajo, Jungkook aún seguía despierto. Estaba estudiando, y al parecer estaba teniendo dificultades con algo porque se quejaba, arrancaba hojas de su cuaderno, las hacía un bollo y las tiraba al piso con bronca.

- Lamento interrumpir tu concentración. - le dije.

- Cierra la boca. - me contestó.

- Es tarde, deberías ir a dormir, Jungkook.

- No me digas qué hacer, enano.

No importaba que tan mal me tratara, ya no lo veía igual luego de conocer toda la historia detrás de ese carácter bravo que tenía. Y por supuesto ya no estaba enojado con él.

- ¿Tienes problemas con algo en específico? ¿Quieres que te ayude? - me acerqué a él y espié sus apuntes por detrás de su hombro.

- Quítate. - me empujó - No necesito tu ayuda.

- ¿Algebra, eh? Tuve esa materia en primer año. Y no es por presumir pero me saqué un diez en todos los exámenes.

- Felicitaciones, Einstein. Ahora déjame en paz. Tengo que entregar estos ejercicios para mañana.

- ¿Y escucharte renegar durante toda la noche porque eres un idiota que no se anima a pedir ayuda? Oye, yo necesito dormir. Déjame ayudarte, tendrás tu trabajo listo para mañana, te sacarás un diez y yo podré dormir tranquilo sin escuchar tus quejas. Ambos salimos ganando ¿qué dices?

Me miró como si estuviera pensándolo y se ve que ya estaba cansado porque terminó aceptando mi propuesta.

Tomé mi silla y me senté a su lado en su escritorio.

- Que conste que solo te estoy usando, Jimin-ssi. Esto no es nada de amigos.

- Está bien, puedes usarme todo lo que quieras. - le sonreí pero tarde me di cuenta de que tal vez aquello había sonado un poco mal.

- ¿Qué pasó con tu plan de ignorarme y mirarme con cara de culo todo el día?

- Lo olvidé. No soy rencoroso.

- No, solo eres un tonto.

Si estaba intentando hacerme enojar de nuevo, no lo lograría. No esta vez. Podía seguir intentando todo lo que quisiera.

- Entonces...¿ya aceptaste que tu relación con tu no-novio o lo que sea es una farsa? - continuó diciéndome mientras yo resolvía sus ejercicios.

- Mi relación con Yoongi es cosa mía. Tú deberías callarte y estar prestando atención a lo que hago así para la próxima ya sabes qué hacer, burro.

- Pero sabes que tengo razón. Por eso te enojaste conmigo ¿No es así? Admítelo, Jimin-ssi. Quiero escucharte decir que tengo razón.

- Y yo quiero escucharte decir cómo se resuelven estos ejercicios.

Jungkook bufó, su plan para fastidiarme no estaba funcionando y me di cuenta que eso lo desesperaba. Yo sonreí para mí mismo.

- No te hagas el que no te importa. - continuó - Ambos sabemos que te mueres de ganas de que te bese de nuevo. Fuiste muy obvio anoche, parecías desesperado. - se burló.

- Listo. - le mostré la hoja con los ejercicios ya resueltos. Él la tomó sorprendido de mi velocidad. - Eran una estupidez, no sé por qué te costaban tanto. Deberías prestar más atención en clase, Kook...y dejar de pensar en lo que yo quiero o hago. - le sonreí, me levanté de la silla y me dirigí hacia mi cama.

Jungkook no dijo nada, por primera vez lo había dejado sin palabras y yo me sentí victorioso.

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