Compañeros - Kookmin

Diecisiete

Me moría de ternura con Jungkook. No podía creer que me había dado su chaqueta para que no pasara frío. Para colmo se sentía tan calentita, grande y acogedora. Me hizo sentir abrigado no solo en el exterior, sino también por dentro.

Claro que él seguía actuando como un idiota, fingiendo que no le importaba, pero yo podía ver más allá de eso. Yo podía ver más allá de la dura coraza que Jungkook se ponía. Y si podía hacerlo, es porque él me dejaba, inconscientemente quizás, pero lo hacía.

Eso solo lograba hacer que me gustara cada día más.

Cuando volvimos al campus, nos despedimos de los chicos y nos dirigimos a nuestro sector de los dormitorios.

No quería llegar allí en realidad. Quería seguir caminando al lado de Jungkook, aunque sea en silencio, con su chaqueta puesta. No quería quitármela jamás.

Pero terminamos llegando a nuestra habitación. Y entonces solo podía pensar en lo que pasaría a continuación...

- Bueno...¿no fue tan malo lo de hoy, cierto? - pregunté sentándome en mi cama.

- Supongo que no. - respondió.

- ¿Admites que te divertiste entonces?

- Creo que diversión es una palabra muy fuerte, Jimin-ssi.

- Bueno, entonces dime. ¿Cómo te sentiste? Es tu momento. Expláyate.

Jungkook me miró molesto. Sabía que esto no le gustaba. Pero un trato era un trato.

- Tus amigos...no son tan malos. - comenzó - Bueno, hablan demasiado, igual que tú, pero supongo que eso no es suficiente para hacerlos merecedores de mi odio. Eso es todo.

- Jungkook...

- ¿Qué más quieres que te diga?

- Más que eso. Lo que en verdad sientes.

Se sentó en su cama que estaba al lado de la mía, mirando hacia mi dirección y quedamos entonces frente a frente.

- Hacía mucho que no salía. - dijo - Quiero decir, he tenido salidas, he salido a comer o a pasear con mi hermana y su familia, pero nada más. No he salido con chicos. Nunca me invitan a ningún lugar. Y las veces que sí lo han hecho, me negaba. Así que hoy...fue un día especial para mí. Lo admito.

- Oh...- exclamé sorprendido por aquella declaración. - ¿Y por qué te negabas?

- Porque no me interesa hacer amigos. Ya lo sabes.

- ¿Tienes...miedo de que la gente te lastime?

- Los únicos amigos que tuve...fueron en la escuela. Y fueron unos malditos bastardos traidores. Así que digamos que tuve malas experiencias.

Ya conocía algo del asunto por lo que me contó su hermana pero no podía comentarlo en ese momento, ya que se supone que yo no debía saber nada de eso. Fue entonces cuando me empecé a sentir un poco culpable por ocultarle esa información. Pensé en comentarselo en ese preciso momento pero no pude. Se lo había prometido a su hermana y además eso me haría perder la poca confianza que me estaba teniendo entonces. Porque vamos, era confianza claramente. Jungkook no estaba abriéndose a mí por un favor sexual solamente. Lo sabía.

- Porque hayas tenido amigos falsos y horribles no quiere decir que todos vayan a ser así. - respondí.

- Lo sé, Jimin. Me lo dice todo el mundo. Pero igual...cuesta. No lo sé...a veces creo que estoy mejor solo. Menos problemas y preocupaciones.

- Sí, pero menos felicidad también. Nadie quiere estar realmente solo, Kook. Deberías darle otra oportunidad a la gente. Sí, seguramente te encontrarás con algún otro imbécil en el camino, pero también te sorprenderás con la cantidad de gente buena que hay, con la cantidad de gente que te hará reír, disfrutar y hasta llorar de felicidad. Te estás perdiendo de mucho...