Compañeros - Kookmin

FINAL 2/2

Jimin

No podía creer que lo estaba viendo. Y justo en ese momento. ¿Qué hacía allí? ¿Por esa zona de dormitorios?

¿Podría ser que...?

- Hola...- saludé nervioso cuando se acercó a mí.

- Hola, Jimin. - respondió con un pequeña y tímida sonrisa.

- ¿Cómo...cómo estás? ¿Qué haces por aquí? - pregunté directamente.

- Umm, una amiga vive por este sector. Tengo que ir a llevarle unos libros. - señaló su mochila.

- Oh...ya veo.

Me sentí desilusionado. Pero hice mi mejor esfuerzo por no demostrarlo.

- Me alegra oír que tienes nuevos amigos. - respondí en cambio.

- Sí, es el grupo de Namjoon en realidad. Pero me han aceptado muy bien.

- Claro...

- Veo que tú...también has hecho nuevos amigos. - comentó luego algo serio.

- ¿Qué? ¿Quién?

- Lo digo por el sujeto ese con el que estabas.

- ¿Qué? No, no. No es mi amigo.

- Eso parecía...digo, está bien si sales con alguien más. No tienes que ocultármelo, es tu vida.

- Jungkook, no estoy saliendo con nadie. - aclaré.

- Sí, bueno...no importa.

¿Que no importaba? Mierda, ¿era necesario que me dijera aquello y de esa manera?

- Tengo que irme, Jimin, hasta luego. - se despidió rápidamente y pasó por mi lado.

- Espera...¿eso es todo? - exclamé enojado. - No hemos hablado hace meses ¿y eso es todo lo que vas a decirme?

- Lo siento, no debí venir por esta zona. Solo olvídalo. - respondió en un tono algo molesto él también y siguió su camino como si nada.

No entendía qué carajos estaba pasando. Pero definitivamente no era lo que tenía en mente que ocurriera cuando lo volviera a ver.

Entré enojado a mi cuarto pero luego lloré. Hacía mucho que no lloraba. No por Jungkook.

¿Es que ya me había superado? ¿Ya me habría olvidado?

No podía encontrar otra razón para que actuara tan frió conmigo. Como si ya no le importara. Parecía que no le había producido nada el verme, cuando yo todo lo contrario, casi que me desarmo por dentro.

La poca esperanza que había estado teniendo esos meses se derrumbó ante mis pies en un santiamén. Tae tenía razón. Mis amigos habían tenido razón. Había dejado llevar la ilusión demasiado lejos. Porque ahora estaba sufriendo otra vez...

¿Y si eso era todo? ¿Y si ya lo había perdido para siempre?

Jungkook parecía haberme dejado atrás. Quizás era hora de empezar a hacer lo mismo yo también...

Jungkook

Caminé hasta mi cuarto y me tiré a la cama. Puse mi almohada sobre la cabeza y ahogué un grito en ella. Estaba molesto conmigo mismo. Luego recordé los ejercicios de respiración que mi terapeuta me había enseñado y me di cuenta que era un buen momento para ponerlos en práctica una vez más.

Funcionaba. De a poco me tranquilizaba. Había avanzado mucho estos meses y si bien seguía yendo a las sesiones, ahora solo me bastaba concentrarme un momento y la sensación de furia lentamente se alejaba de mí.