Jungkook me ayudó a levantarme y me llevó a nuestro dormitorio. No podía dejar de llorar como un bebé. Me dolía todo el cuerpo, pero no era por eso por lo que lloraba principalmente. Estaba asustado y tenía miedo. Jamás había vivido una situación de violencia de esa clase.
- Ya deja de llorar. Estás bien. - me dijo cuando volvió del baño con una toalla húmeda en la mano. - Creo que no te pasó nada grave. ¿O sí? ¿Quieres que te lleve a la enfermería?
Negué rápido con la cabeza, no quería ir a ningún lado. Quería estar en la seguridad de mi habitación. Se sentó a mi lado en la cama, y apoyó la toalla en mi cara, donde aquel idiota me había pegado. Aún seguía sangrando y me asusté cuando vi la toalla blanca manchada de rojo.
- No te preocupes, es solo un corte. No creo que necesites puntos. Créeme, tengo experiencia en esto.
- Gracias. - hablé por primera vez en nuestro encuentro. - Me defendiste.
- Ese chico es un idiota. No sé por qué te hizo esto.
- Dijo que quería vengarse, por lo que le hiciste.
- Que tarado. Lo siento...No tenías nada que ver en realidad. Pero ya le di su merecido. No creo que quiera intentar atacarnos de nuevo.
Fue entonces que observé con detenimiento el rostro de Jungkook y él también se veía algo golpeado, aunque no tanto como yo obviamente.
- Lo siento. - había recibido otra golpiza por mi culpa, por salvarme y me sentía mal por ello.
- ¿Por qué? Te dije que la gente seguía siendo una mierda, Jimin. ¿O no te lo he dicho?
- Solo es un chico... - respondí y Jungkook me miró claramente sin comprender mi pasividad ante el asunto. Tal vez esperaba que estuviese molesto o algo así.
- Iré a buscar a tu amigo para que se ocupe de ti. - cambió de tema.
- Es tarde, debe estar durmiendo, no lo molestes. Mañana tiene un examen importante.
- ¿Alguna otra persona que pueda cuidarte ahora?
- ¿Tú?
- Jimin, yo...no puedo hacer esto ¿sí? Te llevaré a la enfermería.
- Me salvaste. Pudiste no hacer nada pero lo hiciste. Porque no me detestas como dices hacerlo.
- Solo estaba afuera, fumando, cuando escuché todo el lío. Tampoco iba a quedarme a mirar.
- Pudiste haberte ido.
- Ese idiota se merecía una buena paliza de todos modos.
No iba a admitir que lo hizo por mí, pero sabía que así fue, así que se lo dejé pasar. Entonces sonreí y finalmente me calmé y dejé de llorar.
- No quiero que tengas problemas por pelearte en la universidad, Kook.
Me miró raro al escucharme decir ese apodo, pero me ignoró y siguió haciendo presión con la toalla en mi herida.
- No pasa nada. Creo que nadie nos vio. No había nadie afuera.
- Gracias! - exclamé de nuevo. Me tomé el atrevimiento de cerrar la distancia entre nosotros y lo abracé.
Pude notar que quedó sorprendido ante tal acción. No me correspondió el abrazo pero tampoco me hizo a un lado.
- Eres mi héroe. - agregué luego.
- No seas dramático, enano. Quítate y déjame ir a buscar hielo para ti antes de que se te hinche la cara y te veas horrible.
Reí y me quedé solo un ratito hasta que volvió con una bolsita de hielo. Me la entregó y me la puse en la cara yo solo. Él se quedó en su cama y cada tanto chequeaba si necesitaba algo.
ESTÁS LEYENDO
Compañeros - Kookmin
Fiksi PenggemarEn su tercer año de universidad, Jimin estaba feliz porque por fin tenía un cuarto para él solo en el campus. Pero esa felicidad duró poco cuando un nuevo compañero fue asignado de improvisto a su misma habitación. Jimin siempre había sido una perso...