¿Primos?

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Evan se sento en el borde de la cama, mientras que yo me quede mirándolo cruzada de brazos apoyada en la puerta. Si me acercaba a él, iba a terminar perdonándolo sin más, y no quería.

-No se por dónde empezar...- hablo por primera vez mi primo-

-Bueno, quizás por la parte donde me agarras como si fuera un juguete de tu propiedad, y comienzas a gritarme- volver a pensar en ese momento hacia que me ponga nerviosa.

-Mierda, porque todo lo complicas?-

-Ahora la culpa es mia? Evan, si vienes solamente a decirme eso, te puedes ir- abri la puerta indicándole que se marche. Mi primo se acerco a mi, y luego cerro la puerta.

-Emma- sus manos tomaron mis mejillas,y luego coloco un mechon de pelo detrás de mi oreja- Te quiero, joder, te quiero y no sabes cuánto. Y perdóname por no haberte dicho lo de mi cumpleaños, pero es que simplemente me importa un carajo. Tampoco quería gritarte de esa manera en la fiesta, verte besandote con otro me puso como loco. Sea lo que sea que tengamos, no quiero que termine, no quiero perderte Emma, no a ti- aquellas ultimas palabras hicieron que se forme un nudo en mi garganta. Evan nunca me habia hablado de esa forma, se sentía débil en ese momento, comprendi entonces que asi se debio sentir cuando su madre lo abandono.

Tome su rostro y lo bese.

-Nunca me vas a perder Evan- lo abrace tan fuerte y el a mi, que sentí que me iba a romper hasta el último hueso. Y es que en ese momento no me importaba nada más.