It was always about Thomas [{Completa}]

Parte XV.

Doble actualización!!

– ¿Qué demonios pasó? – Aulló Arthur cuando entré gritando por ayuda en la cocina dejando a Thomas en el suelo.

– Nos dispararon.

– ¿Dónde demonios estaban? – Gritó rajandole la ropa a Thomas para exponer la herida de bala.

– Iri no tienes porque responder, no tienes que darle explicaciones a nadie; eres La líder – Polly y Ada aparecieron en sus pijamas mientras me quedé ahí de pie, John me observó.

– ¿Qué tienes? – Un dolor punzante se posó en mi estómago donde llevé mis manos para encontrarme con la sangre brotando de la herida de bala – ¡Mirina! – John dio un salto para tomarme entre sus brazos antes de que cayera de rodillas al suelo – ¡ayuda!

– John, Polly está a cargo – Murmuré observando a la mujer que asintió a unos metros de mi – Johnny boy eres tan hermoso – él sonrió, mis ojos se cerraron.

3 semanas después.

Entré a la casona empujando la puerta de la cocina, todo estaba en silencio, caminé hasta el salón principal para encontrarme con Finn tratando de agarrar señal en el teléfono.

– Hey – Saludé descolgado la mochila de mi espalda, Finn estaba pálido.

– Iri...

– ¿Por qué les dio por llamarme así de nuevo?
– Grace está dando a luz y mi teléfono no agarra señal.

– ¿Qué?

– Préstame el tuyo para llamar a Thomas.

– ¿Dónde está ella?

– Con Polly, arriba – Le lancé el móvil subiendo por la escalera – 164224. No espíes mis fotografías pequeño degenerado – toqué la puerta temblando al escuchar los gemidos de Grace, me adentré de inmediato pasando el recibidor para llegar a la habitación principal en donde la rubia estaba recostada con Polly a los pies de la cama revisándola.

– ¿Cómo va?

– Está lista para pujar, la ambulancia no alcanzará a llegar antes de que para – Me metí al baño lavándome las manos para traer toallas limpias – Iri, necesito que la ayudes a sentarse. Grace será mucho más fácil que paras de cuclillas, la gravedad hará lo suyo – la rubia me observó con el rostro desfigurado, apenas bajó de la cama saqué las sábanas para lanzarlas al rededor de las vigas para formar un columpio.
– Vale Grace, afírmate aquí – La tomé entregándole las sábanas para pasarlas por debajo de sus brazos se dejó caer encuclillandose con los pies firmes sobre las toallas que Polly había puesto en la alfombra – ¿Qué hago Polly?

– Quédate conmigo – Susurró Grace apretando mi mano la observé nerviosa sus ojos penetraron en mí con fuerza. Asentí.

– Vamos Grace, sabes parir, perra, zorra, loba, darás a luz como nuestras ancestros – El cuerpo de Grace tembló apretando mi mano, al tiempo en que un aullido brotó de su boca buscando consuelo en las vigas al aire del techo – será rápido, hija, estás coronando – anuncio Polly observando lo que sucedía.

– Tranquila Grace – Susurré quitándole el cabello del rostro, respiró profundamente.

– Aquí viene otra contracción, linda, hazlo con fuerza – Una vez más el gemido escapó de su boca haciendo temblar su cuerpo, que antes me parecía débil – Tengo su cabeza, dos veces más y lo tendremos aquí, saquemos sus hombros – Grace pujó otra vez y pude escuchar el llanto del niño que Polly se apresuró a poner contra el pecho de la rubia que se recostó sobre las toallas del suelo – piel con piel Mirina – mis temblorosas manos bajaron los delicados breteles del vestido exponiendo los pechos de aureolas oscuras se colocó al niño en medio de los senos y lloró con él, mis piernas temblaron para caer sentándome frente a ella observando el blanco cordón umbilical aún conectado a la placenta dentro de ella – Felicidades, es un varón muy sano.