Capitulo 20

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El día fue pasando lentamente, me sentía aburrida ya que estaba acostumbrada a estar en el trabajo, mi mirada se pasea por el apartamento de Edmund y sonrió al recordar cada día que lo ignore sin saber que un día estaría aquí.

El teléfono suena y estoy debatiendo si contestar o dejar que lo haga el contestador.

—"Edmund soy el Dr. Ventura, he estado llamando a la casa de Charlene pero no me puedo comunicar con ella, los últimos resultados que le practicaron ya llegaron, necesito hablar... "—mi corazón está latiendo errático, ¿qué rayos pasó?  He levantado el teléfono para atender al Dr.

—Soy Charlene —respondó, el Dr se ha quedado un silencio un momento, mi cuerpo está temblando...quizás descubrió que tengo algo malo.

—Charlene... —las palabras de saludo del Dr no les he puesto mucho interés, necesito saber que tengo, él pregunta si puedo llegar al consultorio pero creo que no soportare la espera, siento que mi corazón explotará.

—Por favor, dígame que tengo... yo necesito saberlo ahora... —titubea y luego suspira al otro lado de la linea.

—Bien, te lo diré pero necesito que estés aquí mañana ... —ahora puedo asegurar que es grave lo que tengo, cierro los ojos y aprieto con fuerza el auricular... voy a morir —... lo importante es que el bebé está bien —parpadeó al prestar atención a sus últimas palabras ¿de qué habla? — de igual forma me gustaría hacerte un ultrasonido.

—¿De qué habla? —me he dejado caer en un sillón, mis piernas tiemblan

—De tu embarazo Charlene —abró más los ojos, estoy atónita... ¿embarazada? A mi memoria vinieron los años de mi matrimonio, esos en los que esperaba con ansias quedar embarazada pero no paso, provocando discusiones y distanciamiento con mi esposo... me acuso de ser infertil, algo que le creí,dándolo por hecho y heme aquí recibiendo la noticia que seria madre, que Edmund y yo dentro de siete meses tendríamos un bebé en nuestros brazos, Dios ¿cómo se tomaría Edmund la noticia? Yo no era la mujer que amaba —¿Estás bien? —escuché que preguntó el Dr.

—Estaré mañana temprano en su consultorio, agradezco su llamada —nos despedimos mientras yo subía mis piernas en el sillón y las abrazaba, no podía creer la noticia, seria madre, llevaba dentro de mi una personita, cerré los ojos y dejé escapar las lágrimas de emoción, mi más grande sueño y que creí imposible se iba a realizar.

Edmund

—¿Qué pasa? —Gregorio no responde sólo se recuesta en el respaldo de su silla y me observa —Gregorio...

—Nada importante Edmund, sólo quiero saber de la salud de Charlene

—Está mejor, recuperándose... —asiente

—Me alegra saberlo, supongo no te molesta que la llegue a ver

—No me molesta —Gregorio sonríe.

—Eres una persona madura Edmund, la verdad no se como me tomaría saber que el ex amor de tu pareja la llega a visitar.

—¿Ex amor? —lo veo sonreír

—Supongo Charlene te hablo de nuestra relación —Frunzo el ceño mientras él se acomoda mejor en su silla.

—¿Relación? —lo veo asentir —no hubo una relación... — él sonríe ampliamente.

—No dijimos nada por que era el jefe, no queríamos que en la empresa hubieran rumores ya sabes como son los chismes pero me sorprende que dado que son parejas, ella no te contó acerca de nuestra relación —lo miré con furia pero me controle.

Mi Jefe©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora