Mi cabeza era un desastre. Sentía como si todo girase a mi alrededor. Me pesaba el cuerpo y apenas podía concentrarme. Recordaba con poco éxito las acciones que acababa de realizar instantes atrás y lo último que recordaba–medianamente nítido–era la cara de sorpresa de Chloe antes de comerme sus labios.
Maldita sea, me hubiera gustado hacer eso en un estado menos lamentable, pero comprendía que nunca había sido mi naturaleza ser tan atrevida en mis acciones. La iniciativa del beso había sido mía, sí, pero la profundidad que alcanzó me sorprendió bastante. Lo único que provocó es que me dejara con ganas de más... Sentía el calor de mi propio cuerpo. La temperatura estaba muy elevada, mi respiración también y peor aún, a veces, sentía que se me cerraba las fosas nasales. En conclusión, el estado en el que estaba era un asco. Entendía la preocupación de Chloe, si estuviera en su lugar, seguramente también estaría de la misma manera.
No pude evitar imaginarlo, era divertido pensar que Chloe pudiera siquiera verse similar a mí; se me antojó imposible. No para ella. Un cosquilleo me invadió desde la boca del estomagó y pronto reptó hasta llegar a mi garganta. Me descubrí riendo por la imagen que se había formado en mi mente. Me daba cuenta del sinsentido de la situación pero me era imposible parar. La risa me dominó por un largo rato.
Hacía ya bastante tiempo había desistido de tener los ojos abiertos por la sensación de vértigo que me invadía al hacerlo, por lo que desconocía qué estaba pasando en la habitación ni quienes permanecían todavía ahí. Concluí que estaba sola, alguien hubiera hecho o dicho algo con mi momentánea explosión de risa. Al cabo de un tiempo, escuché una tímida voz sacarme de mis divagaciones.
–¿M-Max?, ¿qué sucede?... ¿te encuentras bien?
Mis sentidos, a pesar de todo, parecían más alerta que nunca. Rápidamente asocié la voz con Kate y en mi mente apareció ella con una expresión preocupada en su rostro. No era difícil creer que esa sería su verdadera expresión. Apreté con fuerza mis cansados párpados en un intento de abrir los ojos pues no quería que Kate estuviera preocupada por mi causa. Y con bastante dificultad fui abriéndolos. En efecto, ella se veía exactamente como pensé. Acusé que éramos las únicas en la habitación y, con un marcado esfuerzo, dirigí mi cabeza en su dirección.
–Hey... ¿Qué ha pasado aquí? ¿Y las demás?
Me sorprendió mucho escuchar que no estaba arrastrando demasiado las palabras. Quizá me estaba recuperando gradualmente.
–Uhmm... supongo que fumaste demasiado. Chloe fue a buscarte algo de tomar y no recuerdo qué más para tratar de que te sintieras mejor. Rachel dijo que iba a fumar en otro lado. Aunque... creo que, por lo menos Chloe, ya se tardó. Tal vez no encontró lo que buscaba.
Aunque podía sentir con menos potencia los malestares, no es que hubieran desaparecido. Y sobre todo, la pesadez general de mi cuerpo no parecía disminuir. Apoyé mi cabeza contra el borde del colchón de la cama. Bueno, lo cierto es que las mejorías solo eran intermitentes, volvían cada cierto tiempo. Quizá lo único que podía hacer bien era hablar sin divagar tanto, tardar en responder o trabarme en el proceso.
–Entiendo... ¿De eso cuánto ha sido? Es extraño, pero no sé precisar el tiempo que estuve fuera de mí.
–No sé, quizá unos 15 o 20 minutos desde que salió de la habitación.
Maldita sea, ni lo sentí, pensé.
Por impulso traté de incorporarme hasta estar erguida. El mareo no me lo permitió, ni Kate tampoco. Tan pronto como advirtió mi gesto de dolor, se aproximó a recostarme a como segundos antes había estado. Casi me pareció verlo en cámara lenta. No sabía si eran los efectos de la marihuana o si ella era muy rápida. Daba igual. Lo importante es que me sentía agradecida de que estuviera alguien conmigo.
ESTÁS LEYENDO
[Life is Strange] Mi última esperanza.
FanfictionDespués de los sucesos que se desarrollan en el juego y a pocos minutos de que la tormenta arrase con toda la vida en Arcadia Bay, Max decide volver al lugar donde todo comenzó; al día donde tomó la fotografía de la mariposa azul con la intención de...