Hipo al final de cuentas escapó de Berk, 10 años después la vida de Astrid termina en manos de un Maestro Dragón. ¿Podrá un amor sobrevivir a 10 años de distancia?
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POV NARRADOR
Mientras en la isla todos dormían después de un largo día de trabajo, la madrugada estaba en apogeo, y un Furia Nocturna llegaba a la isla que se iluminaba por la luna y las antorchas, pero que dejaban en claro que el pueblo estaba ya dormido.
-Vamos amigo, sobre las nubes- dijo Hipo para esconderse en el cielo, no era época de invasión así que los centinelas tendrían la baja guardia –entremos por detrás- dijo mientras se dirigía a la casa de Astrid y se metían por la ventana. -Ventajas del furia nocturna ser pequeño para un dragón ¿no amigo?- Chimuelo le dio una sonrisa sacando la lengua
Hipo entonces entró , tomó una bolsa de tela y comenzó a guardar ropa de Astrid, esta chica en verdad tiene mucha ropa... pensó para sí, abrió sus cajones tratando de rescatar todo lo posible y encontrar los dos cofres, sabía que no podría cargar todo su contenido, pero le llevaría a Astrid todo lo posible. Cuando abrió el cajón superior encontró enmarcado un dibujo de Astrid de niña, sonrió y lo guardo para sí, fue un regalo de el para ella el ultimo cumpleaños que paso a su lado, le alegraba que aún lo conservara.
-ahora los cofres- dijo mientras buscaba, el de la joyería lo encontró rápido, tomo solo algunas cosas y las guardo. –Astrid dijo que estaba escondido, ¿pero en dónde?- pueblo viejo... muchas casas nuevas, recordó para sí, no podía estar en la parte superior por que había sido reconstruida una y otra vez ... el piso de abajo.
Comenzó a pisar sobre la madera con su prótesis en piso de abajo buscando un sector que sonara diferente... -beneficios de una pierna de metal, supongo- continuo hasta que –ahí estas- se agacho y comenzó a quitar la madera, el cofre apareció rápidamente. –Woo Astrid no mentía, bien amigo tomemos algo- se llevó apenas la mitad, no quería sobrecargar a Chimuelo, y si Astrid era la única con vida en conocer la ubicación de ese cofre en Berk, estaría seguro.
-Tenemos una parada más amigo- dijo mirando a su antigua casa, Estoico sabia del valor de aquella hacha, sabía que estaría ahí... además, quería decirle algunas cosas al jefe
Chimuelo entro por escotilla del techo de la habitación de Hipo, bajaron a la estancia.
Estoico dormía, pero siempre en estado de alerta, enseguida noto la intromisión dentro de su cabaña y bajo, todo estaba obscuro hasta que una voz profunda lo hizo voltear
-no te muevas- dijo Hipo recargado en una pared y los brazos cruzados –o el dispara- dijo señalando con la cabeza al furia nocturna que se movía lentamente enseñando los dientes a la espalda de Estoico
-me he enfrentado a peores situaciones- dijo Estoico con un poco de nervios, una cosa era un gronckle, pero un furia nocturna amenazándote no es fácil de sopesar
-te creo, pero no estoy aquí para eso- dijo caminando hacia el
