El Día Llega a su Fin (Parte 1)

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Ante todo quisiera desearles a todos mis lectores una ¡Feliz Navidad!

Lamento no haber podido actualizar, pero el día de ayer tuve tantas cosas que hacer que se me hizo casi imposible. Pero aquí estoy :D

Pd: Quisiera pedirles a todos que leyeran la historia de mi amigo @ EzequielVelezEspinoz, es muy interesante y quisiera que la leyeran :)

Ahora si comencemos...

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P. O. V Zuri

No saben la alegría que se siente cuando despiertas luego de estar todo un día inconsciente y poder reencontrarte con toda tu familia sana y salva, o al menos la mayoría.

En cuanto desperté la emoción recorrió todo mi cuerpo al toparme con las miradas alegres de mis dos cachorros, no esperaba el momento en poder darles un fuerte abrazo y no separarme de ellos, poder sentir sus pelajes contra mí y, porque no, darle un par de lamidas amorosas por sus pelajes. Normalmente ellos se apartaban de mi cada vez que les hacia ese tipo de cariño, ya que según ellos eran "niños grandes". Pero en esta ocasiona fue totalmente una excepción, no dieron queja alguna sobre mi acto.

Cuando me separe de ellos, mí vista directamente se enfoco en Kopa quien se encontraba a una distancia prudente al frente de mí. Este me veía con una expresión sorprendida, me causaba mas que gracia verlo de esa forma, boquiabierto. Aunque lamentablemente tuve que aguantarme las ganas de reír, sabia que no era exactamente el momento para burlarme del pobre. Al ver lo estático que estaba en su sitio, tome la iniciativa y me empece acercar a el con pasos dóciles. Cuando estaba a punto de llegar, Kopa actuó de manera rápida y el poco espacio que quedaba entre el y yo lo corto abalanzándose a mi en un gran y afectuoso abrazo. Yo solo me quede quieta por solo un minuto, para luego corresponderle ante tal cariño.

Extrañaba mucho sentir como su pelaje rozaba contra el mio, como resguardaba mi cabeza en su melena y poder saber que aun permanece conmigo. No quería apartarlo de mi lado, ya no mas.

El tiempo que habíamos durado abrazados había sido algo largo ya que no quería apartarme de su lado, pero este fue interrumpido al sentir como unas pequeñas miradas no dejaban de vernos, los observe por un momento y vi como los cachorros nos veían con una inmensa mueca de asco grabadas en sus rostros. Sus reacciones eran divertidas, debido a que de la misma forma nosotros reaccionábamos cuando se presentaba una escena parecida, así que ambos nos separamos y les dimos una cálida sonrisa.

Luego de haber pasado un rato entre nosotros, Roho sin querer había tomado un tema bastante importante para todos nosotros... comida.

A decir verdad si tenia algo de hambre, no habíamos comido una comida de verdad desde que llegamos a esta dimensión, lo único que encontrábamos de comida eran huesos o algunos pedazos de carne que hallábamos. No recordaba haber pasado por una situación similar en mi vida y mucho menos haría que mis hijos pasaran por ese tipo de situación, pero no teníamos ningún tipo de opción, ya que no podíamos hacernos descubrir, así que mis esperanzas de comer esa noche se habían desvanecido. Pero en realidad eso era lo menos que me importaba, ahora solo me quería enfocar en el estado de la manada.

Poco a poco empece a caminar hacia el resto del grupo con algo de dificultad, me sentía débil y cansada, pero claramente eso no me iba a detener tan fácilmente. Trataba de caminar por mi misma cada vez que podía, pero no podía hacerlo, con cada paso que daba mis piernas temblaban hasta mas no poder, incluso hubo un instante en el cual estuve a punto de caer, si no fuese por la ayuda de Kopa y los cachorros tal vez me hubiera dando un fuerte golpe en la cara. Y gracias a ellos pude llegar rápidamente a donde deberían de estar los chicos. Tenia que admitir que me sentí algo incomoda al tener todas las miradas enfocadas en mí, se notaba que en ese momento era el centro de atención.

El Rey León: Una Nueva AventuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora