La Apuesta

Capitulo 2: "Él"

-ABBY-

Al día siguiente en la cafetería, estábamos devorando, literalmente, una hamburguesa. Las amábamos, aunque para algunas era solo un montón de grasa para nosotras era lo mejor que había en ese lugar . Después del almuerzo se me hizo tarde y me despedí rápidamente de Cassie, mientras caminaba a toda prisa me tropecé con alguien, ambos caímos y por ende nuestras cosas, fue tan cliché que hasta me pareció escuchar una música de fondo, tal vez hubiera continuado así de no ser por su estúpido comentario.

—Ten cuidado, niña tonta—recogió sus cosas y siguió su camino. Con el poco tiempo que lo observe, puedo ver que era apuesto pero al mismo tiempo, arrogante. Tan solo con su fachada me di cuenta de que pertenecía al grupo de los riquillos, y no es que los conociera realmente, pero con solo verlos era obvio. Recogí rápidamente mis cosas, me di cuenta que estaba llegando muy tarde. Todo el pasillo estaba vacio y en silencio, que el sonido de la puerta sindo tocada, hizo eco en todo el lugar. Bastaron unos segundos para que la misma fuera abierta y encontrarme con la cara aburrida del maestro.

—Llega tarde—dijo con tono borde.

—Lo siento, ¿puedo pasar?—sonreí falsamente. El solo emitió un sonido que yo lo tomé como aprobación. Busqué un asiento libre y el único que estaba vacio, era alado del antipático tipo del pasillo. Genial.

Pasé por delante de todos y tome asiento. El simple hecho de hacer garabatos era divertido, pero su voz se estaba volviendo estúpida para mi.

—¿Otra vez tu?—se apoyo en mi mesa, pero fue ignorado—¿es que acaso no puedes responder niña tonta?—lo miré molesta, pero seguí ignorándolo—estoy empezando a creer que me tienes miedo—rió burlón.

—Si puedo hablar, pero se me hace un desperdicio hacerlo contigo—le sonreí y seguí con mis hermosos dibujos. Quitó el cuaderno de mi vista y lo boto lejos de mi alcance. Esto ya me esta molestando.

—Mírame cuando te hablo—si él creía que era manipulable se estaba equivocando y demasiado—deberías aprende cual es tu lugar, cuando uno habla el otro escucha y...—su palabras fueron cortadas por el golpe que recibió de mi parte con mucho cariño, todo el salón quedo en silencio incluyendo al amargado profesor, quien me nos vio con cara de pocos amigos. Al diablo mi plan de inicio.

—A la dirección—pronunció el mayor. Ni bien empezamos yo ya tengo que visitar al encargado de este lugar. Y desde ese momento supe que lo problemas apenas empezaban.

Como saben las actualizaciones son lentas, ya habíamos escrito sobre eso y aquí les damos un ejemplo.

Solo para decirles gracias por leer. Espero les guste, se que es corto, pero es algo.

Isa&Eli-