Capitulo 12: "Gas pimienta"

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-ABBY-

Me encontraba lista hace media hora. Seguia esperando a Cassie, esa mujer se demora siglos.

Quiero recalcar que no hice caso a mi madre pero si me cambie de ropa, obviamente. Era similar a lo que estaba puesto antes, pero con diferentes colores. Así me sentía más cómoda y no hay problemas. Claro que mi madre me volvió a reclamar por eso pero ya saben, tengo al mejor padre y me defendió. Genial.

-Cassie, enserio, llevas quince minutos cambiando tu ropa, la que sea esta bien-me tiré en la cama, me estaba aburriendo-Deberíamos cancelar esto, talvez para la próxima decidas más rápido.

-Imposible, además ya está, creo que estoy presentable-asintió para si misma, supongo que para convencerse de sus palabras y de lo que llevaba- vamos, se hace tarde-claro.

-Creo que llegaremos a despedir a todos-hable irritada. No quería ir, pero era Cassie y aish, esto era tonto.

Me despedí de mis padres que estaban en el mismo lugar de antes.

-Volvere pronto, más pronto de lo que creen-dije tomando el celular.

-Me alegra, espero te diviertas y golp...

Mi padre se vio interrumpido por la severa mirada de mi madre, reí en mis adentros.

-Trata de ser amable y consigue más amigos, o un novio-puse mis ojos en blanco ante sus palabras.

-Si, si, no esperes eso. Mejor conseguiré comida para ti.

-Abby no, hablo enserio-me miro, al igual que a mi padre, severa.

-Yo también hablo enserio, traeré comida ¿bien?-salí del lugar junto a Cassie y ella seguía con un espejo en la mano arreglandose el maquillaje-basta, estas bien-hablé tratando de quitarle el espejo, lo cual resultó un intento fallido.

Antes de salir completamente del jardín frontal papá me alcanzo, mirando hacia atrás, papá tenía miedo de mi madre y eso resultaba gracioso.

-No escuches a tu madre-habló, claro que no lo haré-toma esto-tomo mi mano y dejo un frasco pequeño en ella-ya sabes, por si alguien se quiere pasar de listo-explicó y entendí cuando leí el nombre de gas pimienta en el-¿bien?-asentí, sonriendo. Mi padre siempre llegó a darme este tipo de cosas por precaución.

-Claro papá, gracias-me despedí de él y llegué corriendo hacia Cassie. Sus ojos estaban entrecerrados mientras me miraba.

-Ahora se porque todos se alejan de ti-reí por su comentario-date prisa y evita usar eso.

Tomamos un taxi para ir al lugar que no quedaba ni tan lejos ni tan cerca. Cuando llegamos sentí mis piernas flaquear un poco, no era una pequeña reunión de amigos, creo que estoy viendo a medio instituto en el lugar. Había personas fuera bebiendo y otras cuantas en las demás plantas de la casa. El lugar era amplio pero nadie estaba en el jardín, era como si hubiera un límite. Oí un grito de emoción, proveniente de Cassie.

Ella amaba este tipo de lugares, aunque no fuéramos a tantos. Traté de dejar todo lo negativo fuera de mi mente. Respiré profundo, había mucha gente y eso me alteraba un poco, fallé en el intento de tranquilizarme.

-Creo que nos equivocamos-miré a mi amiga y ella ya estaba caminando rumbo a la fiesta.

- No digas tonterías. Vamos, estarás conmigo, lo sabes-habló suave. Y talvez dejé mis nervios de lado.

Bien, solo para aclararles que odio los lugares con mucha gente, pero recurro a muchos, ya sea por Cassie o por mamá, y en ocaciones por mi hermana. Papá no, porque el sabe eso. Pero a los demás parece no importarles, aunque después de un tiempo a mi tampoco.

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